Oklahoma veta a Abrines, que se va del Eurobasket
La FEB y el jugador ceden ante las presiones de los Thunder
Alex Abrines sabía desde el almuerzo del mediodía que debía abandonar la concentración de la Selección por su lesión en la tibia y AS lo adelantó en su página web antes de las cinco de la tarde. Pero la confirmación oficial de la noticia llegó más de una hora después. Lo hizo en primera persona el presidente de la FEB, Jorge Garbajosa: “Abrines no sigue. Ellos (por Oklahoma) tienen una cosa muy clara: que la salud es lo primero. Hemos tenido conversaciones con Oklahoma y la NBA en las que hemos decidido que, ante la falta de consenso global y el anuncio en algunos partes de que existe un pequeño riesgo, la salud manda y es mejor que Álex no siga. Ha venido un representante del cuerpo médico de los Thunder y hemos recabado seis o siete informes. Pero no hay consenso y hemos dado un paso adelante. El jugador no continúa con nosotros”, fue la explicación del presidente.
Pero lo cierto es que detrás de los informes médicos y las explicaciones políticas, subyacen las presiones de unas franquicias NBA que hace años ejercen una presión extrema sobre los jugadores. Estas se han radizalizado desde que se firmó un nuevo contrato de televisión multimillonario que rpercutió en fichas altísimas incluso para jugadores medianos como Abrines (18 millones de dólares en tres años).
Con la legitimidad que le dan sus 16 años en la NBA, Gasol sí levantó la voz: “Lo de Abrines ya se veía venir. Veremos cómo se puede solventar. Los equipos NBA que ejercen esta presión, ponen prácticamente entre la espada y la pared al jugador para que decida si sigue jugando o no. Como la medicina es un campo que no es blanco o negro, te ponen esta presión. Se fuerza a tomar la decisión de proteger para que no haya problemas contractuales. Lo vivimos el año pasado con Marc. Pese a intentarlo y estar en dinámica de equipo, Memphis tenía la idea cerrada y no iba a poner ninguna facilidad para que fuese a los Juegos (...). Veremos si se puede mejorar y el jugador puede tener un poco más de libertad, no estar entre la espada y la pared y no poder defender a su país”.
Abrines no voló a Estambul con el resto del equipo. Sólo ha jugado 15 minutos. Oklahoma le ha obligado a sacarse el billete de vuelta y ahora tendra que esperar al Mundial 2019.