Navarro ya es leyenda
Se va con 10 medallas de la Selección, que suma 13 en Eurobasket
Los gigantes Gasol, con Sergio Rodríguez de tercer hombre, esculpieron un bronce agónico más para España. Este, un modelo exclusivo con el perfil de Juan Carlos Navarro. La leyenda que dejó ayer la Selección manteado por sus compañeros entre lágrimas es un auténtico icono. Pau y Marc no podían permitir que su amigo del alma se fuera sin colgarse su décima medalla con España, que suma su decimotercer metal en el Eurobasket, el noveno en los últimos diez torneos. Una dinastía hegemónica en Europa. Indestructible.
Martillazo a martillazo, España terminó por forzar el candado ruso, que al principio pareció frágil pero dio guerra hasta el minuto 38, concretamente después de un rebote ofensivo de Pau Gasol, que sacó el último catálogo de trucos que le ha entrado en la tienda. Por aquí, por allá, sus 26 puntos y los 25 de su hermano, además de los 16 de un Sergio Rodríguez extraordinario en este Eurobasket, llevaron a España otra vez al podio. Ganadores y aspirantes al oro siempre, no es lo que vinieron a hacer. Pero su entereza para levantarse del baile de Eslovenia es lo que hace grande al deporte y a este grupo, que mantiene su estatus. Quédense con esta medalla, cada vez serán más difíciles. Ahora porque se va Navarro. Y luego, esperemos que más tarde que pronto, cuando Pau Gasol, 37 años, se ponga fecha de caducidad.
España mereció la medalla. Muy pronto mandaba 10-3 con Marc a los mandos. La defensa que planeó Scariolo sobre Shved funcionó. Rusia, entre dudas y abatimiento por el palo de la semifinal ante Serbia, sumó 13 pérdidas en el primer tiempo. Pero a 1:53 del final del primer cuarto, Marc se lesionó en un tobillo. Alerta en Memphis. Anotó los dos tiros libres de la antideportiva y se fue con 21-13 al vestuario para ser atendido. Rusia se acercó hasta 21-17 y Pau, en el banquillo, miró a Scariolo, que estaba de espaldas. Como si hubiera una conexión, el italiano se giró y le llamó. Era su momento. Una vez más, la enésima, a su lomo cabalgó España hasta una máxima diferencia de 45-28. Marc hizo la rueda de calentamiento al descanso. Debió sentirse bien, porque anotó 11 en el tercer cuarto. Parecía suficiente, pero Rusia se resistió a caer. 76-73. Entramos entonces en territorio Gasol. Por aquí, por allá, Pau hizo canasta tras canasta y a 40 segundos del final ya tenía abrazado a su amigo Navarro. No le iba a dejar colgado en el último día. Gracias y grande, Juan Carlos.
Claves Pau Gasol, 26 puntos, y Marc mpulsaron a España ante Rusia Dinastía España, orgullosa, nueve metales en los últimos 10 torneos