Un traslado muy feliz
Felicidad. El Wanda Metropolitano fue una fiesta. Un fiestón. El Atlético ganó 2-0 ante el delirio de su afición. Lo hizo ante un rival directo, ante un Sevilla al que se le tienen ganas. El conjunto sevillista parte a principios de temporada con la aspiración de robarle protagonismo al equipo de Simeone, aunque parece que al final no lo termina de conseguir. Y por lo visto en el terreno de juego, este Atleti está bastante por encima del Sevilla. Los rojiblancos no hicieron un partidazo, pero sí se mostraron serios, competitivos, con determinación para irse a por el partido cuando la ocasión lo requirió. Veo a la gente marcharse feliz del estadio, aficionados que han llegado con tiempo al campo, expectantes ante el nuevo partido en este recinto. Varias horas después se marchan más contentos aún.
La Liga. El Atlético sigue sumando. Ganó a un equipo complicado como el Athletic hace unos días y ahora derrotó a otro como el Sevilla, que aún no había perdido. Y lo ha hecho con solvencia, con autoridad, por lo que la hinchada está muy ilusionada. Ilusión por ver que
Griezmann sigue marcando, por ver que Carrasco es un diablo cuando está bien, por comprobar que Gabi sigue siendo el de siempre... Por no hablar de la defensa. El Atleti funciona y la gente sueña. El Atleti quiere hacer algo importante, aunque habrá que seguir el ritual del partido a partido.
El estadio. La jornada comenzó pronto, con muchas aficionados tomando chocolate con churros a primera hora. Un poco más tarde comenzó la actividad en las dos Fan Zones, con gente cantando, bailando y pasándoselo bien. La experiencia en el Wanda Metropolitano está siendo muy positiva. El club se ha esforzado al máximo para que todo salga bien y la hinchada ha respondido con paciencia, viendo las cosas de la mejor manera posible y perdonando cualquier error. Así, todos juntos, el Atleti irá a más, tanto abajo en el césped como a nivel social.
Las placas. Las placas en el Paseo de Leyendas fue de lo más visto por la afición rojiblanca. La de Hugo
Sánchez, por cierto, estaba ayer llena de desperdicios. Como hace unos días. Sobra ya esto. Hugo fue un gran jugador, pero ni nos va ni nos viene. Indeferencia hacia él. Eso es lo mejor. El Atleti, su afición tiene que estar por encima de Hugos o Kunes. Ahora llega el Chelsea. Y se espera otra fiesta.