“En la segunda parte de esta temporada me pondría un 10” Marc Márquez
Ha elogiado a Dovizioso en inglés y ha dicho que ha aprendido mucho de él… —Sí, sí, es así, es verdad. He aprendido muchas cosas de él, y espero utilizarlas, pero el año que viene. No podía cambiar el chip. Me sentía tan fuerte durante todo el fin de semana que era muy difícil gestionar una carrera a lo ‘amarrategui’, ahí quieto detrás… No podía. Era muy consciente de que no tenía que arriesgar más de la cuenta pero el error no ha sido por ir pasado de vueltas, ha sido por miedo, cosa que no tengo nunca. He tenido miedo, respeto, de que Zarco entrara y lo último que quería era que cayeran dos pilotos, y yo dentro. Porque ahí sí que Dovi ganaba muchas plazas de golpe. Sí que he frenado más tarde y ha venido un error, pero no ha sido por ir pasado de vueltas. —Es el piloto más laureado de la historia a los 24 años, más incluso que Rossi. —Está claro que me pongo contento y que estoy orgulloso. Pero al final no es sólo el que se sube encima de la moto: te tienes que saber rodear de la gente que toca, tu entorno, tu equipo, hay una fábrica detrás, hay un trabajo día a día, y sin esto no sería posible. Desde los 11 años estoy rodeado por la misma gente, no he tocado nada, ni preparador físico, ni me he movido de Cervera, intento mantenerlo todo igual, soy feliz y estoy disfrutando, y por eso he celebrado el título así. —¿Es su mejor título?
—Cada año maduras y cada año intentas mejorar. Claro, ahora diría, ‘sí, es el mejor título’. Pero también he cometido errores que no tocaban esta temporada. El de Le Mans, el de Argentina, cosas que se pueden mejorar, tres ceros demasiado pronto en el campeonato… Sí, lo hemos podido salvar porque los otros han cometido errores. Quizás temporadas perfectas no hay, pero se pueden mejorar siempre. La del año pasado comenzó de una manera diferente y la gestioné un poquito mejor, este año me tocaba atacar, y espero que la siguiente sea mejor. Sobre todo en la segunda parte de la temporada casi me pondría un 10. —Ha explicado que a mitad de temporada se asustó porque le salieron unas calvas... —(Risas)
Estaba con la peluquera y me dijo que me estaban saliendo unas calvitas. Le dije que tengo 24 años y que no me quedaré calvo, que mi abuelo y mi padre tienen pelo. De allí fui directo a ver al doctor Charte y le pedí que me lo mirase y me dijo: ‘Tienes que relajarte. Esto está provocado por los nervios y la ansiedad’. Y era en el momento crítico de la temporada, después de Montmeló, donde me caí cinco veces. Me dio una cremita que lo solucionó. Espero que no vuelva a pasar y poder gestionarlo de manera diferente. —¿Qué le enseña 2017?
—Siempre aprendes muchas cosas, pero la mayor enseñanza es que nunca debes subestimar a nadie. Temerlos a todos por igual. Soy sincero: a principio de temporada nunca habría puesto a Dovizioso en la quiniela. Cuando Dovi ganó en Mugello dije: ‘¡Bien! Ha ganado Dovi y le he restado puntos a Viñales y a Rossi’. Ganó también en Montmeló y pensé ‘bueno, es
Dovi, han quedado detrás los otros’. Y al final ha sido el rival más fuerte…