El Cádiz confirmó su resurrección ante el Reus
Un cabezazo de Carrillo dio la victoria a los locales
Tres puntos de oro consiguió el Cádiz ante un Reus que pasó de rácano a desquiciado. Y eso que el árbitro no dio por válido un gol fantasma de Bijker. El Reus se sumó al movimiento de colocar cinco defensas en el Carranza, una manera de buscar la solidez defensiva y evitar que las bandas del cuadro local se encontraran cómodas aprovechando.
Desde el primer minuto, los amarillos se encontraron cómodos sobre el césped y así lo demostraron con peligrosos acercamientos que se fueron desviados. Salvi, bastante activo, fue el protagonista de la mayoría de ocasiones, buscando de manera incansable la banda de Álex Menéndez.
Sin embargo, la jugada polémica estaría en botas de Bijker en el 16. El lateral zurdo, que lograba penetrar en el área con la pelota, se sacó de la chistera un disparo raso que, tras tocar en el brazo de Edgar Badía, entraba en la portería. Íñiguez sacaba el balón después de sobrepasar la línea de gol. El árbitro y el juez de línea consideraron que no entró y el tanto no subió al marcador.
Espoleó esta acción al equipo rojinegro, que comenzó a pisar con más frecuencia el campo cadista. Todos los balones que volaron sobre el área cadista contaron con la aparición de Cifuentes, pero quien encontró el gol fue el Cádiz. En el 29’, un córner sacado por José Mari conectó con la cabeza de Carrillo, que ponía el 1-0.
López Garai dio entrada a Haro en la segunda mitad para jugar con un 4-1-4-1. Un cambio de plan. Haro envió un trallazo desde tres cuartos de campo que terminó en el travesaño de Cifuentes. Aunque el dominio era catalán, los amarillos fueron plantándose cada vez mejor en su campo. Fue el mejor partido de la temporada del Cádiz ante un Reus que al principio no quiso y posteriormente no pudo.