Colom, Vidal, Fran Vázquez...

En los días previos a las Ventanas de la FIBA pude advertir verdadera angustia en el seno de la Federación Española de Baloncesto, con Jorge Garbajosa a la cabeza, por el peligro real de que la Selección, sin los 29 jugadores de la NBA y la Euroliga en la cancha, pudiera quedarse fuera del próximo Mundial y, en consecuencia, de los Juegos Olímpicos. Hoy, Garbajosa y su equipo respiran aliviados. Su victoria ante Montenegro les quitó el viernes una losa de encima. No digamos ya después de tumbar ayer a la campeona de Europa. Es verdad que el resto de países también están sensiblemente debilitados por las ausencias. En Eslovenia faltaban sus tres principales estrellas, Doncic, Dragic y Randolph, pero en Burgos jugaron siete ganadores del Eurobasket, entre ellos Prepelic y Vidmar, de lo mejorcito. Si se han sacado estos dos partidos adelante ha sido principalmente por dos razones. Una: por el trabajo de Sergio Scariolo, que ha formado un equipo en tiempo récord. Y dos: por el compromiso y el orgullo que han mostrado estos jugadores. Vidal (36 años) metió seis triples en siete intentos, Colom se exhibió con 25 puntos (30 de valoración), Fran Vázquez (34 años) volvió a demostrar por qué un día fue 11º en el draft de la NBA, Saiz y Paulí anticiparon su brillante futuro... Aquí no han estado los mejores, pero los que han estado han tenido un comportamiento ejemplar. Y merecen un respeto. Cuando llegue el Mundial, el seleccionador debería acordarse de quiénes pusieron los primeros ladrillos. Porque más de uno tiene calidad sobrada para continuar en la Selección cuando vuelvan los ‘titulares.’

“...MÁS DE UNO TIENE CALIDAD SOBRADA PARA CONTINUAR EN LA SELECCIÓN...”