Más opciones para elegir
El Hyundai Ioniq es una excelente muestra del crecimiento de la oferta
Hyundai tardó en presentar batalla en el mercado de los automóviles eléctricos pero al presentar su oferta parecía justificar el tiempo que dedicó a su desarrollo. El Ioniq es una propuesta como pocas en el mercado español, con el desarrollo de tres variantes del mismo concepto de una berlina familiar: híbrido, híbrido enchufable y eléctrico puro.
Una estrategia con la que la marca coreana pretende satisfacer cualquier exigencia o necesidad de los clientes interesados en un coche electrificado. El hilo conductor es una carrocería de cinco puertas y 4,4 metros de longitud, con un aspecto muy moderno y aerodinámico, que envuelve un habitáculo de amplitud suficiente dentro de su segmento.
Los acabados se benefician de la evolución general de los productos Hyundai en los últimos años; es decir, sin llegar a un nivel premium son más que correctos, con plásticos de calidad y ajustes en la misma línea. La consola central exhibe un aspecto tecnológico muy acorde con la filosofía del producto, sobre todo por la gran pantalla a color de 7 pulgadas que sirve para controlar varias funcionalidades del vehículo.
Sin duda, la gran aportación del Ioniq es la ya mencionada variedad mecánica. La más sencilla es la híbrida convencional, que combina un motor de gasolina de 1,6 litros con otro eléctrico para alcanzar una potencia conjunta de 141 CV, dejando el consumo medio homologado en los 3,4 litros a los 100 kilómetros.
La siguiente opción es la híbrida con baterías recargables en la red doméstica. En términos de rendimiento no existen variaciones, pero sí en cuanto a la autonomía en modo eléctrico: es capaz de circular hasta 50 kilómetros sin emisiones, por lo que el gasto medio en los 100 primeros kilómetros se queda en tan sólo 1,4 litros.
Por último, tampoco podía faltar el Ioniq 100% eléctrico, menos popular en ventas pero con importante peso estratégico en la gama. En su caso, la motorización ofrece una potencia de 120 CV y se alimenta con baterías de polímeros de litio de una capacidad de 28 kWh. La autonomía declarada por el fabricante llega a los 280 kilómetros, que son unos 200 en condiciones reales de circulación.
El habitáculo de esta berlina de carácter familiar es generoso y con un aspecto tan tecnológico como se espera de su filosofía