Getafe y Eibar empatan y aburren hasta en Japón
Jordán falló un penalti. Dimitrovic, decisivo en el 94’
Si hubiese estado en casa hubiera cambiado de canal”. La declaración de Dani García, capitán del Eibar, resume lo que fue el partido.
Para felicidad de la estrategia de crecimiento de LaLiga, finalmente jugaron los dos japoneses, Gaku e Inui, por lo que el Getafe–Eibar pasará a la historia por ser el primer partido de la Liga española en el que se enfrentaron dos japoneses.
No hace falta que Getafe y Eibar se miren en un espejo para reconocerse, les basta con mirarse el uno al otro. En muchos aspectos son casi idénticos. En orden, en intensidad, en esa búsqueda rápida de la portería rival... Tanta similitud provocó que se anularan mutuamente. La primera noticia deportiva del partido la puso Amath a los dos minutos, a cuyo remate llegó a tiempo Dimitrovic. La primera ocasión del Eibar no llegó hasta el minuto 26 y fue sin querer. Alejo, queriendo centrar a Sergio Enrich, acabó estrellando el balón en la cruceta.
Sin un claro dominador, lo cierto es que el Eibar era el que estaba más cómodo. Un remate de Kike en el 46’ rozó el poste y en el 53’ llegó el penalti de Djené a Sergi Enrich. Jordán acudió con decisión, pero su lanzamiento fue digno de ser celebrado en Twickenham, la Catedral del Rugby. El Getafe respondió con un remate de Fajr (62’) intentando sorprender a un Dimitrovic que estaba fuera de la portería. En el 69’, otra intervención de Guaita evitó el tanto de Enrich. El mejor del Getafe estaba siendo Guaita, lo que dice todo y dice poco del Getafe. Sólo al final, el equipo de Bodalás pareció querer el partido de verdad, y entonces apareció Dimitrovic, sacando de la raya de gol un disparo de Lacen en el 94’.