El Madrid se desploma en las segundas partes
En una clasificación sólo con las primeras partes sería líder Pero sólo con las segundas sería nada menos que undécimo
EI Madrid de LaLiga es uno en las primeras partes y otro en las segundas. Tanto que, si sólo contasen los primeros tiempos en el campeonato español, el equipo de Zidane sería líder, con cuatro puntos de ventaja sobre Barcelona y Valencia. Sin embargo, volteando el experimento y contabilizando sólo los segundos tiempos, el Madrid se hunde: sería 11º, a sólo cuatro puntos del descenso a Segunda, según las clasificaciones elaboradas por Mr. Chip.
El Barcelona, por su parte, arrasa en esta segunda hipótesis: líder destacadísimo con 49 puntos, 12 por encima del Atlético, segundo. Son las dos realidades que vive el Madrid, vigente campeón de Liga, esta campaña: todo el trabajo de las primeras partes se va al traste en las segundas, lo que le lleva a su actual situación: cuarto clasificado, a 19 puntos del Barcelona y con el Villarreal pisándole los talones, aunque los blancos deben jugar su partido aplazado contra el Leganés (21-F) por el Mundial de Clubes.
En las primeras partes, el Madrid ofrece un balance invicto: once triunfos, siete empates y ninguna derrota. Ha marcado 23 goles y encajado sólo seis. En las segundas, el desplome es mayúsculo: tantas victorias como derrotas (cinco) y ocho empates, con más goles en contra (11) que a favor (9).
Los motivos de semejante diferencia entre lo que sucede antes del descanso y después del mismo no están claras. La lógica hace pensar que es una cuestión física: al Madrid los partidos se le hacen largos. Pero Zidane no confía en esta teoría. “Hay que analizar el partido en profundidad. Estamos bien físicamente. Correr, corremos. No es una cuestión de correr...”, explicó tras el empate en Balaídos contra el Celta (22). Queda el terreno abonado para explicaciones alternativas sobre la caída en picado de los blancos pasado el ecuador de
Negativo El balance de goles en los segundos tiempos es de -2
los partidos: falta de hambre tras un 2017 con cinco títulos, un once titular anquilosado y necesitado de una revolución, una confluencia de estados de forma mejorables en varias de las piezas claves del equipo (Cristiano es buen ejemplo)...
Ciclón. Al otro lado del Puente Aéreo todo son alegrías, con el Barcelona liderando LaLiga con su capacidad para arrasar en las segundas partes.
El Betis es el único equipo del campeonato que ha logrado mantener su portería a cero ante el Barcelona en un segundo tiempo.
Fue en la primera jornada. Desde entonces, los de Valverde han sido un ciclón en las segundas mitades, en las que han anotado 34 de sus 52 goles.
Un dato escandaloso que ha permitido al conjunto blaugrana levantar partidos como el del pasado domingo en San Sebastián, donde se fue al descanso perdiendo 2-1 para acabar ganando 2-4, o en Getafe, donde a la media parte caía 1-0 y acabó imponiéndose 1-2. Otras segundas partes para recordar en esta primera mitad de Liga se dieron en Mestalla, donde Alba empató en el 82’, o en el Wanda Metropolitano, donde el Barcelona se fue al descanso cayendo por 1-0 y en una gran segunda parte Luis Suárez empató el duelo.
Capítulo aparte merece la segunda parte del Clásico en el Santiago Bernabéu, en la que el Barcelona logró un parcial de 0-3 en 45 minutos después de firmar las tablas en el primer acto. La diferencia física entre ambos equipos se hizo patente ese día con los goles de Suárez, Messi y Aleix Vidal.
Y no se trata sólo de los goles marcados; también en los recibidos el Barcelona saca mejor nota que el Madrid, tanto en las primeras partes (56) como en las segundas (4-11). La solidez defensiva de los de Valverde crece todavía más tras el descanso pese a que el Barça se vuelca más en ataque, como prueba la diferencia de 17 goles marcados más en los segundos tiempos (17-34).
El Barça tiene clara la receta: insistir en lo que está haciendo y que le ha llevado a un sólido liderato. No así el Madrid, pues Zidane debe encontrar cuanto antes la solución para evitar que se le escapen más puntos y que hasta la clasificación para la Champions pueda estar en peligro.
Arrasa El Barça, 34 goles a favor y sólo cuatro en contra tras el descanso