Carreño y Feliciano mezclan bien y falta sólo una victoria
El asturiano y Kyle Edmund, con opciones de jugar hoy
El dobles comenzó a deshacer el entuerto en Marbella. A corregir la derrota de Roberto Bautista el viernes ante Cameron Norrie, el 114º del mundo, que obligaba a alargar la serie de primera ronda de Copa Davis. Pablo Carreño y Feliciano López aportaron toneladas de tranquilidad para hoy con su contundente victoria sobre Jamie Murray y Dominic Inglot por 6-4, 6-4 y 7-6 (7/4).
Con la pista del Puente Romano en Marbella empujando (se rozaron los 8.000 espectadores), con el sol (16º) templando la tierra, el ambiente eléctrico de la Davis impulsó el nuevo experimento de dobles de España. Sergi Bruguera decidió dar la alternativa a dos grandes jugadores de singles (Carreño es el 10º y Feliciano, el 37º) con incursiones regulares (aunque con otras parejas) en el dobles, y resultó una dupla de éxito en su estreno. Era la décima pareja distinta en la última década.
Pablo Carreño, finalista del US Open 2016 junto a Guillermo García-López, fue un tiro con el resto. Quirúrgico y potente, buscando los ángulos. Feliciano López (“el debut superó las expectativas”) fue tan fiable como lo suele ser junto a Marc López (campeones de Roland Garros 2016). Elevó saques por encima de los 200 km/h y fue letal al cruce.
Enfrente, Jamie Murray era el encargado de tirar de Dominic Inglot. El hermano mayor de Andy es un gran especialista. Exnúmero uno junto a Bruno Soares, barre la red con su zurda como pocos. Pero Inglot (46º) no estuvo a su altura, pese a haber compartido ya cuatro eliminatorias previas los dos. Sobre el saque de Inglot cayeron los breaks en el primer y el segundo set. En el tercero, se llegó al desempate y no tembló el pulso.
España está a una victoria de los cuartos. Visto el panorama del viernes, sería una sorpresa que jugara Bautista. Carreño tiene muchas papeletas para salir en el primer partido ante el sorprendente Norrie para intentar cerrar la serie. “Consulto a los jugadores, pero decido yo”, dijo Bruguera, que ve a todos al “cien por cien”. Otra opción sería reservar al gijonés para un hipotético quinto y mantener a Ramos o incluso dar salida a Ferrer en el cuarto. Gran Bretaña también podría recurrir a Kyle Edmund (26º), descartado la primera jornada. “Podría jugar. Es nuestra única opción”, zanjó su capitán. La nueva norma de cinco convocados abre la baraja. A España le basta un punto.