Igualdad y derroche físico

Para el momento de la temporada en el que estamos se vio una primera jornada muy igualada y con mucho derroche físico por todos los equipos, con emoción, con resultados inciertos en muchos partidos, y con alegría. Y con la sorpresa del Puente Genil que derrotó a un Granollers que parecía superior, pero que se encontró con un rival muy respondón que dio la campanada en los penaltis.

De los cuatro partidos el más claro fue el tercero, entre el Ademar y el Guadalajara, aunque pudimos apreciar la lucha del conjunto alcarreño. Porque en el choque entre el Logroño y el Anaitasuna vimos muchas alternativas, aunque dio la impresión de que los riojanos llegan en un gran momento de forma a este final de temporada. De todos los aspirantes, el único que nos sorprendió en su ataque fue el Barcelona, jugando con siete hombres en la parte final del partido para sacar ventaja en la presión del Valladolid. El resto de los equipos fue más clásico, atacando sin portero sólo en las inferioridades. Pues bien, pese a todo, el Atlético Valladolid siempre estuvo en el partido, nunca bajó los brazos y nos mostró un pivote como Abel Serdio que mantuvo su tónica de toda la temporada.

Para las semifinales se prevé que se mantenga ese buen espectáculo, esa incertidumbre, con una eliminatoria que en teoría es más clara, la del Barcelona frente al sorprendente Puente Genil, y otra en la que los dos equipos, Ademar y Logroño, son aspirantes a estar en la final de mañana en el Madrid Arena.