Ángel hurga en la triste herida de Las Palmas
Su gol en el minuto 88 mantiene al Getafe en Europa
Por increíble que parezca, las cosas en Las Palmas siempre pueden ir a peor. Ayer, una vez más, volvió a dejarse tres puntos en casa. No es que el Getafe apretara demasiado, tampoco lo hizo la formación local, pero Ángel fue el más listo de la clase cuando más falta hacía.
Sin jugarse nada, y ante un Getafe reservón y masacrado por las bajas (al menos pudo contar con Rémy), Las Palmas ofreció un tímido dominio inicial. Por poco la suerte le sonríe, pues Gálvez estampó el balón al larguero en el minuto 9 tras un córner botado por Nacho Gil. Salvo el leve empuje inicial amarillo, lo cierto es que el primer acto fue un canto al sopor, nada que objetar, menos que ofrecer por uno y otro equipo. El Getafe se limitaba a esperar un contrataque certero, atacando los espacios que se generaban a la espalda de la defensa de Las Palmas, y así estuvo a punto de adelantar Ángel a su equipo, y no lo hizo porque se pasó de revoluciones cuando intentó regatear a Ximo, último escollo antes de Chichizola.
Las Palmas se pudo llevar la alegría de la tarde si Nacho Gil, con todo a favor, no despejara el balón a la grada al intentar superar a Guaita. En cualquier caso, el 0-0 al descanso era el resultado más justo.
Entrenamiento. El duelo se avivó tras el descanso, pero no lo suficiente para evitar la sensación de entrenamiento con público. Pudo adelantarse Las Palmas al filo del minuto 60 con una peligrosa internada de Aguirregaray. Poco después lanzó un duro zarpazo el Getafe en forma de contrataque, cuando Chichizola abandonaba su zona de confort para lanzarse desesperado a por Amath, al que privó de un gol seguro. Jairo se topó con Guaita, pero Ángel se puso el partido por montera y, tras una galopada, le sirvió el 0-1 en bandeja a Jorge Molina, que erró. El tinerfeño coronó su gran partido en el epílogo. Se durmió Javi. Al acecho estaba Gaku, que jugó para Molina. Este combinó con Ángel, que no perdonó. 0-1 y a seguir soñando con Europa.
Oportunidad clara Jairo pudo anotar el 1-0, pero se topó con un gran Guaita