El tenis dice sí a la nueva Copa Davis de Piqué
El cambio a un Mundial de 18 países recibió el 71,43% de los votos
La Copa Davis tal y como la conocemos pasó a la historia ayer en Orlando (EE UU) tras 118 años de competición. Aunque de facto lo hará el 25 de noviembre, cuando concluya la última final con el actual formato. La asamblea general de la Federación Internacional de Tenis (ITF) votó a favor de la propuesta de reforma impulsada por Gerard Piqué y el grupo inversor Kosmos, que convertirá el torneo en un Mundial que se disputará en una sede europea, Madrid o Lille (se anunciará en las próximas semanas), entre el 18 y el 24 de noviembre de 2019. España es uno de los cuatro países ya clasificados por ser semifinalista en la edición de este año, junto con Francia, Estados Unidos y Croacia.
La nueva Davis recibió un 71,43% de votos favorables (325 síes, 130 noes y cuatro abstenciones o nulos), por encima de los dos tercios que eran necesarios para su aprobación (66,66%), en presencia del propio Piqué, el futbolista del Barcelona que viajó a Florida con permiso de su club tras el trofeo Joan Gamper... y a solo dos días del inicio de LaLiga Santander.
David Haggerty, presidente de la ITF, fue el otro gran triunfador de la votación junto a Piqué, que lo celebró a lo grande con su equipo, como si de un título se tratara. Los jugadores, que en su mayoría apoyaban la iniciativa (entre ellos Nadal y Djokovic), también salieron reforzados. Por el contrario, el resultado supuso una derrota para países tradicionalistas como Australia (“Estamos extremadamente decepcionados”, escribió en un comunicado la federación oceánica), Alemania y
Gran Bretaña, que votaron en contra. No así para Francia y España, que estaban a favor y que podrían albergar las primeras fases finales de la reformada Davis. Tomás Carbonell (vicepresidente) y José Antonio Senz de Broto (vocal de Relaciones Internacionales) representaron a la RFET en la histórica asamblea.
El acuerdo entre la ITF y Kosmos es para los próximos 25 años y por 3.000 millones de dólares (algo más de 2.633 millones de euros). La bolsa de premios para los jugadores será de 17,5 millones. La asamblea, además, ha concedido plenos poderes a la junta directiva de la Internacional para regular tanto la Copa Davis como la Copa Federación. “Así se agilizará la toma de decisiones”, afirmó Haggerty.
En las redes sociales llovieron críticas contra el nuevo sistema, que no es del agrado de los aficionados. Se sienten perjudicados como espectadores, ya que en muchos casos no podrán seguir a sus selecciones en vivo como hasta ahora.
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