Anuar, capitán del Valladolid
Que el fútbol cambia de un día para otro no lo voy a descubrir yo ahora. Anuar el pasado verano estaba con un pie y medio fuera del Real Valladolid, ya que no parecían contar con él cuando Luis César llegó al banquillo; situación similar ocurrió con Toni y ambas situaciones cambiaron en el último suspiro y los dos fueron importantes en el ascenso y si sumamos a Calero, formaron un trío de canteranos que hicieron que esa identificación que tiene el público con el equipo creciera aún más. Esta semana hemos escuchado al ceutí en La Tertulia de AS y SER y su discurso de sentimiento blanquivioleta es indiscutible. Un niño que con 13 años deja su familia y cambia hasta de cultura (es musulmán), tiene mucho valor y coraje y eso le ha llevado hasta la Primera División en el club de su vida.
El aumento de contrato se enmarca dentro de la política de renovaciones de jóvenes que está llevando a cabo Miguel Ángel Gómez y el club y se asegura el ADN que aportan jugadores que han crecido con el escudo que defienden en el pecho. Hay una mala costumbre de mirar hacia la cantera cuando las cosas no van bien; la gente dice ‘que jueguen los del filial’ cuando se acumulan las derrotas. Creo que es más productivo que lleguen los que tiren la puerta del vestuario del primer equipo a cabezazos y una vez que lo haga, tengan las oportunidades que se han ganado en el césped. La hornada que está en marcha debe dar crédito al trabajo hecho en la cantera por entrenadores como Rubén Albés por ejemplo. Anuar aumenta su vinculación y tarde o temprano terminará siendo capitán del Real Valladolid.