Kerman resolvió con un bombazo
Noqueó en el cuarto a Gavin
Cuando Frankie Gavin no dio el peso (dos kilos por encima), Kerman Lejarraga pidió a su equipo que el combate se hiciese como fuera. “Me has faltado el respeto, también a la afición. Yo me encargaré de que disfrutéis”, avisaba a los 10.000 fans que acudieron al BEC. Lo hizo. Kerman revalidó su Europeo del peso welter tras noquear al británico en el cuarto asalto. Le destrozó.
Lejarraga estaba enfadado, pero demostró que es un púgil cerebral. No arriesgó ni un ápice hasta que olió sangre. Se cubrió a la perfección en el primer round, dejando al británico que llevase el peso de la pelea con su jab. Sin prisa.
El segundo asalto fue casi un calco del primero, pero con Kerman lanzando su jab. En el tercero el campeón subió el ritmo. Empezó a mandar y Gavin a retroceder, estaba en la media distancia hasta que sintió el poder de su rival. Era el principio del fin. Dejaba huecos, Kerman los estudió y fue a por ellos. Con un crochet de derecha Gavin se tambaleó, pero resistió. Siempre tuvo arrojo. Debió agarrarse, pero cruzó golpes. Su fin. Kerman engañó con golpes a la guardia a Gavin y cuando vio el hígado descubierto clavó su mano izquierda. Letal. Quedaban cuatro segundos para el final, pero nadie se rehace de eso. Europa se le queda pequeño a Kerman. Estados Unidos, próxima parada.