“No sabía por qué los tiros no entraban y llamé a mi padre”
Carroll llevaba 8/21 en el playoff
Jaycee Carroll fue el héroe del Real Madrid en el segundo partido ante el Barcelona. Un triple suyo a falta de 1,9 segundos, el quinto de la noche, tumbaba al equipo catalán y ponía fin a una minicrisis que el propio Carroll contaba después: “Llevaba varias semanas pensando ‘no sé qué pasa que los tiros no entran’. Estoy entrenando bien y tirando bien. Llamé a mi padre y le dije que no sabía qué me pasaba, pero por fin este lunes los lanzamientos han entrado”.
Carroll no recuerda otra canasta así en su carrera, aunque el del lunes fue su segundo tiro ganador con el Real Madrid (tumbó al Bayern en 2015 con otro triple). “Creo que ha sido una de las mejores canastas de mi vida”, reconoce el escolta estadounidense, que se ha guardado el balón de ese partido de recuerdo. “Después del tiro que no entró de Hanga (un triple lejanísimo que dio en
el aro), cogí el balón, me tiré al suelo y mis compañeros me cayeron encima, pero nos queda una victoria más. Eso sí, el balón no me lo quita nadie”.
Antes de ese partido, en el que terminó con 25 puntos y 5/7 desde la línea de tres puntos, el escolta de Wyoming no llegaba al 40% de efectividad en la Liga Endesa, algo que no le había ocurrido en ninguna de sus ocho temporadas en el equipo blanco. Llevaba 58 triples en 146 tiros, un 39,7%. En el playoff el porcentaje, incluso, era peor: 38,1% (8/21). Gracias a su gran partido del lunes ya rebasa el 40% en efectividad: 63/153, un 41,2%.
En la Euroliga, los general manager de los 16 equipos le eligieron otra temporada más como el mejor tirador de toda la competición, pero sus números también han estado por debajo de la media. Nunca había tirado tan mal: 37/108, un 34,3%. Pero desde el lunes, Carroll vuelve a sonreír.
Inédito Antes de su 5/7 ante el Barça, no llegaba al 40% de efectividad