Muguruza deja escapar el triunfo en su regreso
Perdió ante Keys con Anabel Medina en su equipo
Garbiñe Muguruza volvió a las pistas 42 días después de su sonado fiasco en la primera ronda de Wimbledon (perdió ante la 127ª del mundo, la brasileña Haddad-Maia) y lo hizo como en ese último partido, con derrota. Esta vez, en la primera ronda de Cincinnati, su rival tenía más pedigrí, Madison Keys, de 24 años, 18ª del ranking y finalista del US Open en 2017. La española, sin entrenador desde que rompió con el francés Sam Sumyk, no ofreció malas sensaciones, pero volvió a embolicarse en un partido que tenía ganado con un set de ventaja y 5-3 en el desempate del segundo. Al final, 6-7 (4), 7-6 (5) y 6-4 en 2h:20 de frustración. No era el mejor entorno para recuperar sensaciones.
Anabel Medina, capitana de Copa Federación que acompaña
a Muguruza provisionalmente, tendrá que trabajar para recuperar la mentalidad de su eventual pupila, a quien tratará de ayudar también en el US Open, próximo y cercano objetivo.
Buen inicio. El primer set podría haberlo cerrado antes Garbiñe, que tuvo saque con 5-4 para adelantarse en el marcador después de romper el servicio de Keys. Pero esta le devolvió el quiebre y la manga se abocó a un desempate que empezó mal para la española y acabó bien. Le dio mucha confianza resolver el parcial, habría sido un bajón que lo perdiera, más aún conociendo la frágil moral que demuestra Muguruza a veces.
A partir de ahí vio más claro el partido y fluyó el tenis que todo el mundo le demanda, una mezcla adecuada de agresividad y control. Keys colaboró tirando bastantes bolas fuera y por mucho. Con un break por cabeza se llegó a otro desempate. Quejas aparte, Garbiñe intentó dominar los nervios, se animó y tomó distancia rápido (4-1). Tenía que aguantar las embestidas de la americana (sumó 56 golpes ganadores y 52 errores no forzados) y no pudo. Remontó Keys desde un 5-3 y hubo set definitivo. Mala suerte.
Se mascaba la tragedia por los antecedentes y unas molestias debido a la descomposición del vendaje que llevaba Muguruza el pie izquierdo. Empujada por su público, Keys se llevó el partido. Garbiñe acabó con sólo 9 winners. Su apuesta por la paciencia esta vez no le funcionó, pero puede ser el camino a seguir. Tampoco tuvo suerte, Carla Suárez, que cayó ante la rusa Alexandrova (24 años y 43ª) por 6-4 y 6-1.