Racing y Fuenlabrada se reencuentran en Segunda del partido solidez azulona
Ambos equipos disputaron la final de Segunda B
El equipo de Mere Hermoso es el que menos remates a su portería concede de toda el fútbol profesional español. Es la base de su gran temporada.
La historia, la afición, el estadio... sin duda acompañan al Racing en su regreso a Segunda. Pero le faltan muchas más cosas, justo las que tiene el Fuenlabrada. Por eso uno anda en puestos de descenso y el otro, sin vitola de clásico, puede presumir de llevar las 18 jornadas en puestos de promoción de ascenso.
El Racing, que ha cambiado más, incluso de entrenador, anda falto de energía, compite mal y no mata los partidos. La ausencia de Alexis y de Toribio, muy discutidos, va a propiciar cambios en el once con la entrada de Olaortua y Kitoko. El dibujo será el mismo, pero el míster cordobés quiere un Racing más físico, que gane duelos y que meta en su campo al Fuenlabrada.
La clave local seguirá siendo la línea de tres cuartos, Yoda, Cejudo y Lombardo, aunque no es descartable que este último juegue más minutos de mediapunta y Cejudo por la izquierda de lo que venía siendo habitual. Cristóbal ha descubierto que el de Lyon tiene un potencial tremendo cerca de la media luna. Siempre parece a punto de liarla.
Crecido. El Fuenlabrada viaja a Cantabria henchido en una racha que sorprende incluso al propio club azulón. Hace apenas medio año, el único deseo era asentarse y, a partir de ahí, ahondar en cotas mayores. Su ritmo es frenético. Las bajas que deberá superar hoy, especialmente las de Randy Nteka, Clavería y la de última hora de José Fran, básicos en los esquemas de Mere, van a suponer un reto para el técnico. Él se fía de los de siempre.