“Tengo el plan A, de que se licite la obra, y el plan B, de retrasarla”

—Por garantías de competencia, las tramitaciones de licitación quedaron paradas y en el momento que se inicie la actividad, se iniciará la tramitación de todas las nuevas licitaciones en Vigo. Tengo el plan A de que se licite la obra de Balaídos y tengo el plan B de que se tenga que retrasar un tiempo. En principio, mi voluntad de hacer la grada de Marcador es total.

—¿Manejan algún plazo?

—Los plazos son largos porque usted sabe que la tramitación de una licitación de esa envergadura tiene que ir a Europa y es lenta. Es una obra de mucho dinero (16,6 millones de euros) y requiere una tramitación administrativa muy detallada porque puede haber alguna reclamación y perderíamos más tiempo.

—¿Cuánto paga el Celta por el alquiler de Balaídos?

—Cero. El Celta no paga nada por Balaídos y el Celta salió del concurso de acreedores gracias a que, siendo yo alcalde, le hicimos una ampliación de su concesión y la puso como activo. Yo nunca escucho al presidente del Celta decir que el Ayuntamiento le ayudó de forma notable a salir del concurso de acreedores. No lo dice nunca.

—¿La relación con Mouriño es irreversible? —Irreversible para mí a favor de la ciudad nunca hay nada, pero en este momento lo que está sucediendo es que el Celta quiere llevar al equipo a jugar a Mos, dañando muy seriamente al pequeño y mediano comercio de la ciudad de Vigo. Y en esa dirección no vamos.

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