La salvación subiría el precio de De Tomás
El club debería pagar 2,5 millones más por el punta
Raúl de Tomás le costó al Espanyol 20 millones de euros, el fichaje más caro de la historia. A esa cifra hay que sumar un millón más de los derechos de formación, que asumió el propio club perico. Y hay otros 2,5 que están en el aire, en función del rendimiento del madrileño. Un millón dependerá de la salvación; el otro, de si el jugador alcanza los diez partidos (acumula seis en LaLiga y uno en la Copa), mientras que los 500.000 euros están supeditados a que marque cinco tantos (lleva cuatro en LaLiga y uno en la Copa): una cantidad que ya habría alcanzado. Estas dos últimas serán realidad salvo lesión del jugador y no dependen de la salvación.
La operación De Tomás debía ser un salvavidas para el club, aunque en caso de que no se logre la permanencia entrará en un laberinto. El director general, Josep Maria Duran, comentó que los salarios de los fichajes de invierno ya contemplaban un hipotético descenso, aunque queda pendiente la opinión del futbolista a partir del fin de LaLiga. A sus 25 años (26 en octubre), De Tomás vería como su carrera sufre de nuevo un freno, y aunque siga vinculado contractualmente, se tendrá que hablar sobre su situación.
El COVID-19, que afectará a la economía del fútbol, también puede impedir una futura venta del jugador por una cuantía superior a la que pagó el Espanyol.
Esperan público. Otro efecto directo de la pandemia es la ausencia de espectadores en los estadios, un mal que el Espanyol pretende paliar “lo antes posible”. No en vano, y según pudo saber AS, el club perico está trabajando en un protoclo para que haya público en el RCDE Stadium esta misma temporada. Es decir, en alguna de las seis jornadas de LaLiga que le restan por disputar como local.
El Espanyol enviará en cuanto pueda este protocolo a las autoridades, con el anhelo de que al menos unos 12.000 pericos puedan arroparlo en el estadio.