El enigma Coutinho
Ha bajado 100 millones su valor de mercado en dos años y el Barça no sabe qué hacer para amortizarlo
Pocos fichajes han sido más celebrados que el de Philippe Coutinho en los últimos años en Barcelona. Pese a su precio, 160 millones de euros, absolutamente fuera de mercado, existía la convicción de que con su llegada procedente del Liverpool, que se añadía a la de Dembélé, el club paliaba por completo la dolorosa marcha de Neymar. Coutinho era un jugador ADN Barça. Fino, de toque, con talento. De asociación, desequilibrio, asistencia y gol. Y con clase.
Cuando, después de marcar diez goles y dar seis asistencias en sólo 22 partidos en su primer medio año en el Barça, todo apuntaba a su explosión definitiva en su primer curso completo como azulgrana, Coutinho comenzó una enigmática involución cuya inercia tampoco ha cambiado en Múnich. Estancado en su juego, y enfrentado a la afición por el episodio en el partido de cuartos de final de Champions ante el Manchester United, Coutinho se vio ‘obligado’ a salir del Barça dirección Múnich con una cesión. Sus números, como en Barcelona, no son malos. Pese a su lesión en el tobillo, ha marcado ocho goles y ha dado seis asistencias en 23 partidos oficiales. Sin embargo, y después de un principio de temporada en el que acaparó titulares positivos, su rendimiento tampoco ha sido aplaudido en Múnich. Al contrario, el
Bayern anunció pronto su deseo de no ampliar la gravosa cesión (debió pagar 8,5 millones por la misma además de hacerse cargo de una ficha de doce millones limpios) ni de pagar la opción de compra, que ascendía a 120 millones.
Atrapado en una aparente saudade, Coutinho no ha sido capaz de rebelarse pese a tener unas condiciones innatas extraordinarias para jugar al fútbol. Su cesión, extendida por la COVID-19, concluye el 31 de agosto. El plan del Barça es venderlo, pero no regalarlo. Abidal y Ramon Planes, con la aprobación de Bartomeu, lo han tasado en 80 millones de euros para intentar amortizar un fichaje que cada año le cuesta unos 30 millones. Su agente, Kia Joorabchian, lo quiere de vuelta en la Premier. Hay quien aún piensa que podría ser útil en el Barça.
Precio
El Barça lo ha tasado en 80M€, pero no hay ofertas potentes