‘dolce vita’ en Madrid
El británico tiene un salario de 14,5 millones y vive en una casa valorada en 7,5 que fue de Kaká
Bale sigue siendo protagonista en el Real Madrid por su falta de implicación y puede decirse que tiene los dos pies fuera del Real Madrid, aunque para que se convierta en realidad han de llegar ofertas por él. Desde el medio británico The Sun se han fijado en cómo es su vida en Madrid y cuál es la razón por la que Bale prefiere no moverse, sacrificando una carrera deportiva que le pudo llevar a ser uno de los mejores jugadores del mundo.
Un salario de 14,5 millones de euros anuales debería permitir a cualquiera tener una vida cómoda en la capital, y Gareth Bale no podía ser menos. Comenzando por su casa. Hay quien puede llegar a pensar que se trata de una casa ‘maldita’ para los futbolistas del Madrid ya que si nos fijamos en quién vivió ahí antes que el galés, también coincide que no consiguió triunfar ni cumplir con las expectativas generadas. Nada menos que Ricardo Kaká alquiló la casa en la que actualmente vive Bale.
Desconocemos si el precio del alquiler se lo habrán subido o bajado al galés puesto que se sitúa en unos 11.000 euros mensuales, una cifra ni mucho menos desorbitada para el lugar en el que se ubica, La Finca, y las comodidades que presenta: cuatro habitaciones, piscina cubierta, gimnasio privado, varias terrazas y un garaje con capacidad para seis coches (alcanzan un valor cercano a los 850.000 euros repartidos en un Mercedes SLS AMG, un Bentley
Continental GT, un Lamborghini Huracan, un Ferrari GTC4Lusso y el Audi 7 que el club regala cada año a sus jugadores). Todo esto explica que la vivienda tenga un valor de 7,5 millones de euros.
La vida de Bale en Madrid no se entiende sin el golf, y es que este deporte ha sido el gran protagonista de los últimos años en el entorno del jugador. Aunque su casa cuenta con todo tipo de detalles, sí que echa en falta un campo de golf, razón por la cual es uno de los socios del club de golf Ciudad Grupo Santander, un espacio que ayudó a diseñar el gran Severiano Ballesteros. Cuando no lo hace en la capital, Bale opta por descansar en Marbella, donde elige la Finca Cortesin para no dejar de jugar al golf.
Golf
Es su verdadera pasión y juega tanto en Madrid como en Marbella