Todas las ventas reseñables fueron de fichajes anteriores
Bono, Koundé, Diego Carlos, Reguilón, Fernando, Jordán, Suso, Ocampos y En Nesyri. Siete fichajes de verano y dos de invierno han formado en los onces iniciales que llevaron al Sevilla hasta estas semifinales de la Europa League. Apenas los veteranos Navas y Banega acompañaron a los recién llegados en la alineación ante la Roma y el Wolverhampton, la misma en ambos casos. Un equipo nuevo construido en pocos meses por Julen Lopetegui, que tampoco estaba en el club hasta que le contrató Ramón Rodríguez Verdejo, Monchi. Nada más regresar al Sánchez Pizjuán, jugándose parte de su crédito porque el técnico vasco provocaba recelos en una buena parte de la afición, Monchi se atrevió con Julen y entre ambos armaron tres cuartas partes de plantilla nuevecita. Ya se puede decir que el director deportivo gaditano ha vuelto a obrar un milagro, éste al cuadrado: clasificados para Champions y a dos pasos de ganar la Sexta.
El Sevilla se vio obligado a acometer una profunda renovación en el equipo tras dos años de tensiones y cambios constantes de entrenador. Berizzo, Montella, Caparrós, Machín, Caparrós de nuevo... A trompicones, en Nervión se había seguido cumpliendo el objetivo de ir a Europa y hubo brillantez a ratos. Pero el futuro se presentaba incierto por una plantilla que en mayo de 2019 parecía profundamente debilitada. Ni Óscar Arias ni Caparrós como máximos responsables de fichar habían logrado crear una sola plusvalía entre las más de 20 incorporaciones que realizaron. Traspasos de hecho como los de Lenglet (36,5 millones), Nzonzi (27), Vitolo (36) o Iborra (17), los más lucrativos de los dos últimos cursos, fueron propiciados por el acierto del director deportivo gaditano.
13 incorporaciones de su propia cosecha ha realizado Monchi entre junio y enero. Dos más, que ya no están en el club, había recibido el gaditano de la dirección deportiva
Plusvalías