Una semana después del teremoto del burofax, Leo se puso a trabajar
Alas 15:57 de la tarde, el Mercedes de Leo Messi hacía su entrada en la Ciutat Esportiva Joan Gamper entre la expectación de medio centenar de aficionados y aproximadamente el mismo número de medios gráficos que plasmaron el retorno del crack argentino a la disciplina del Barcelona después de una semana de rebeldía en la que Leo anunció mediante un burofax su intención de irse del Barcelona.
Se iniciaba así la segunda etapa (y puede que la última) de Leo Messi en Barcelona como jugador. El futbolista argentino llegaba media hora antes de lo que marca Koeman al vestuario. Desde la llegada del holandés, se ha establecido de nuevo la norma de que todos los jugadores deben de estar en los vestuarios de la Ciutat Esportiva Joan Gamper una hora antes de la hora marcada para el entrenamiento. La sesión estaba programada para las 17:30 por lo que los jugadores debían llegar a las 16:30 como tarde. 33 minutos antes, Messi ya estaba en las instalaciones del Barcelona.
Messi llegó con el resultado negativo del test PCR que exige LaLiga. El jugador se realizó el test el domingo en su domicilio y ayer por la mañana recibió tanto el club, como él y LaLiga los resultados. Siguiendo el protocolo establecido, el futbolista se ejercitó en solitario y así lo seguirá haciendo al menos durante los próximos días.
Messi rompió su silencio el pasado viernes cuando en una entrevista a goal.com dijo que iba a seguir una temporada más en el FC Barcelona al
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