Benzema regresa a la raíz de su metamorfosis
Cinco goles en las últimas seis visitas del francés
Para Benzema, Sevilla tiene un color especial. Más desde el 13 de enero de 2019, día en el que el Real Madrid visitó al Betis en Liga, aún con Solari en el banquillo. Con 0-1 en el marcador y el descanso acechando, Benzema cayó al suelo tras una disputa con Bartra y, en su intento por amortiguar el golpe con sus manos, se fracturó el meñique derecho. No saltó en la segunda parte y el Madrid lo pasó mal, aunque terminó ganando 1-2, con gol decisivo del exbético Dani Ceballos.
Fue una temporada que acabó muy mal y ya por entonces tenía muy mal color, de ahí que Benzema eligiese evitar el quirófano y la posterior convalecencia. Se le diseñó una férula protectora a medida y, con un aparatoso vendaje, sólo se perdió un duelo copero ante el Leganés. Lo que siguió fueron 14 goles en los siguientes 17 partidos de Liga que disputó y un verano en el que, pudiendo operarse, Benzema prefirió tampoco hacerlo esta vez. Entre el consejo médico y la cábala, el ‘9’ del Madrid vio en aquel incidente en el Villamarín un claro giro en el guion de su carrera a su favor. Y hasta hoy, sigue ese meñique sin operar y el delantero celebrando dianas, esparadrapo en mano.
En aquel 13 de enero de 2019 no vio puerta Benzema en el feudo bético, la única vez en sus últimas seis visitas, en las que ha marcado cinco goles. El último, el curso pasado, en el duelo previo al confinamiento; no evitó la derrota por 2-1, y aquella herida generó la combustión de la que
Sevilla Le gusta la ciudad; en el Pizjuán firmó dos de sus mejores goles
saldría el pacto para levantar la Liga 34, una vez que volvió a rodar el balón. Hasta ocho goles le ha hecho Karim al Betis; sólo a seis equipos ha castigado más veces, con el Granada en cabeza (12).
En Sevilla, Benzema no atiende a colores. Disfruta en Heliópolis y lo hace también en el Pizjuán, donde ha marcado menos (tres goles), pero con gran recuerdo. El último, hace poco más de un año, el 22 de septiembre de 2019, para dar los tres puntos al Madrid de cabeza (0-1). Antes, dos dianas coperas de factura bellísima, tras jugadas personales: una en semifinales de la 2010-11 y otra en octavos de la 2016-17. Sevilla le va.