AS (Valladolid)

Arenga del Capitán Ramos

Sergio tira del carro y recuerda a la caseta que han salido de baches peores ● Florentino acude a Valdebebas y se encuentra con Zidane, reforzado por el vestuario

- J. MAROTO / J. GALLEGO

Los jugadores del Real Madrid se conjuraron en Valdebebas para el partido de Champions contra el Borussia del próximo miércoles y reforzar así la posición de su entrenador, Zinedine Zidane, al que apoya el núcleo duro del vestuario, con Sergio Ramos, Modric y Marcelo a la cabeza. Después, todos ellos posaron en el pabellón blanco para la foto oficial del equipo junto al presidente del Club, Florentino es evidente que su dirección y su forma de llevar la plantilla contribuye­n en parte al desconcier­to existente ahora mismo en el equipo blanco.

LPérez, que tuvo su primer encuentro tras la crisis con el técnico y que comprobó el apoyo de la caseta al francés.

Fue el líder, Sergio Ramos, quien llevó la iniciativa y pidió a sus compañeros un plus, un esfuerzo añadido para lo que queda de año. “Estamos a una victoria de pasar en la Champions, dependemos de nosotros mismos y hay que darlo todo. Esto es el Real Madrid, señores: de peores hemos salido, pero tiene que ser juntos”, dijo el capitán a sus compañeros. Modric, que no se prodiga mucho, también habló para recordar que “tenemos que estar unidos y ganar los próximos partidos: podemos hacerlo”. La charla de los capitanes con el resto de sus compañeros se produjo en la intimidad de la caseta, antes de salir todos vestidos con el primer uniforme para hacerse la foto oficial junto al presidente del club. El compromiso

os continuos tropiezos en Liga y la errática clasificac­ión europea colocarían al borde del cadalso a cualquier otro entrenador. Benítez o Lopetegui ya hubieran volado, pero Zizou tiene dos comodines: el de las tres Champions consecutiv­as, ya bastante agotado porque en el fútbol sólo importa el presente, y el de haber respondido en su día a la desesperad­a llamada de socorro de Florentino Pérez. Con este salvocondu­cto y capeando el temporal que atraviesa el Madrid en estos momentos podría llegar hasta el final de la temporada, incluso sin ganar ningún título, a no ser que le estalle la santabárba­ra del vestuario y los jugadores empiecen a rajar de él. Y entonces, podría buscarse otro modelo de entrenador. de Ramos queda una vez más evidenciad­o en su esfuerzo por haber llegado contra el Sevilla, aunque no correrá riesgos y Zidane se conforma con poder contar con el sevillano el miércoles ante el Borussia.

Zidane no estuvo en esa primera reunión, pero fue informado del cónclave y de su principal consecuenc­ia: tiene el apoyo total del vestuario, o al menos del grupo principal de jugadores. Ya se sabe que otros, suplentes como Isco, no están tan alineados como los demás. Florentino Pérez aprovechó su presencia en Valdebebas para dar ánimos a la tropa y para mostrarle a Zidane su total apoyo, tal y como ayer avanzó este periódico. El francés, que sabe que está sujeto a la ley de los resultados, cuenta con la confianza del presidente blanco, que no le despedirá.

Zinedine Zidane fue el primero en llegar ayer por la mañana a las instalacio­nes del Real Madrid en el norte de la capital. El entrenador francés cruzó la puerta de Valdebebas exactament­e a las 9:09 horas. Inmediatam­ente después han ido llegando el resto de los futbolista­s. Sergio Ramos (9.15 horas) y Modric (9.18) fueron los primeros.

La plantilla al completo estaba en la caseta antes de las diez de la mañana, una hora antes de la hora de inicio del entrenamie­nto. El técnico sabe que los próximos partidos marcarán su futuro, pero ahora trabaja más tranquilo porque ha comprobado que tiene el apoyo total tanto de su presidente como de sus jugadores. Ahora espera salir del bache, como ha hecho otras veces. La última hace bien poco, ganando en el Camp Nou.

Esfuerzo Sergio trabaja, no llega para Sevilla, pero estará ante el Borussia

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