Hugo, bronce con récord
El español, con mejor marca española, fue tercero en los 50 espalda
En una final memorable, tan rápida como un silbido, Hugo González abrió la puerta de su talento en el Europeo de Budapest. El nadador mallorquín, campeón del mundo júnior en 2015 y 2017, se colgó la medalla de bronce en unos volcánicos 50 espalda, que depararon un nuevo récord del mundo para el ruso Kliment Kolesnikov (23.80) y el récord de España para el mallorquín (24.47). Entre medio, la plata fue para el rumano Robert Glinta (24.42).
Ya había advertido Hugo González en los campeonatos universitarios estadounidenses que estaba en un gran estado de forma y siguió su progresión en el Duna Arena. Ya en la primera jornada había logrado la tercera mejor marca mundial del año en el hectómetro, una prueba que no es olímpica, pero que le augura una buena competición en los 100. El nadador de Florida que pertenece al Real Canoe todavía le quedan por delante otras cuatro pruebas.
“Estoy muy contento por hacer mi mejor marca. Estoy bastante bien. Esto dura ocho días así que quiero seguir. Sin mis entrenadores, los fisioterapeutas o mi familia no lo podría hacer. Se lo dedico a mi tía que está en Palma”, comentó Hugo, que superó la mítica marca de Aschwin Wildeboer desde 2009 (24.48).
Al margen de Hugo, Jimena Pérez y María de Valdés fueron séptima y octava respectivamente en los 800 libre con unos tiempos de 8:33.14 y 8:33.90, en una prueba dominada por la italiana Simone Quadarella (8:20.23), que compartió podio con las rusas Anastasia Kirpichnikova (8:21.86) y Anna Egorova (8:26.56). Tampoco hubo sorpresa en los 100 braza, dominados por Adam Peaty con una marca de 57.66, seguido por el ascendente holandés Arno Kamminga, con un tiempo de 58.10 y del británico James Gilby, con 58.58.
Quien quedó eliminada en los 100 braza femeninos fue Jessica Vall, con sus 1:06.93, que fue decimotercera de Europa. Ella era la única clasificada de la delegación española después de una jornada de mañana con muchos estrenos.
Plusmarca El ruso Kolesnikov logró su segundo récord mundial