El PGA del láser
La novedad tecnológica que se estrena hoy en competición profesional no gusta a Rahm: “Me parece la mayor tontería que se ha podido hacer”
El espectacular campo de Kiawah Island acoge el segundo major de 2021 con polémica y la participación de Jon Rahm y Sergio García con la firme intención de ganar por primera vez este torneo para España. Están presentes 99 de los 100 primeros jugadores del ranking mundial.
El uso de láser me parece la mayor tontería que se ha podido hacer en un torneo de golf y mucho más tratándose de un major”, responde categórico Jon Rahm a la gran novedad que presentará el PGA Championship, por primera vez en una competición oficial de carácter profesional, que comienza hoy en Kiawah Island (Movistar Golf, 19:00). El de Barrika (26 años) está en contra de una innovación, vendida para agilizar el juego (“siempre estamos interesados en métodos que puedan ayudar a mejorar el flujo de nuestro deporte durante los campeonatos”, dijo Jim Richerson, presidente de la PGA América), pero que muchos ven como una automatización del juego que afecta a la ventaja que puede obtener un golfista de talento (junto a su caddie) a la hora de leer el campo, usar las referencias, calcular distancias y dirección y, en consecuencia, elegir el mejor golpe posible.
“Yo soy partidario de un golf lo más puro posible. No estoy de acuerdo con eliminar esa parte más humana, más artística. Para eso tenemos los libros de campo y al caddie”, apostilla el vasco.
Rahm no está solo en la protesta ya que, por ejemplo, Manuel Villegas, golfista colombiano y actualmente caddie de su hermano Camilo es igual de rotundo: “No ayudará a darle ritmo al juego y le quitará la belleza. Si este es el camino deberían empezar a permitir que robots leyeran los greens y anemómetros para la velocidad del viento”.
Polémicas al margen, el espectacular campo de Carolina del Sur acoge el segundo Gran Torneo de 2021, que repartirá 9 millones de euros en premios, y que contará con 156 participantes (86 estadounidenses y 70 internacionales), 99 de los 100 primeros del ranking mundial y 35 ganadores de majors. Uno de ellos es Sergio
García (ganador del
Masters de Augusta en 2017) que, junto a Rahm, buscará un hito que falta en la historia del golf español: la primera victoria en el PGA Championship. Precisamente el castellonense de 41 años es el que más cerca ha estado ya que terminó segundo en 1999 y en 2008.
Esquivo para España. Históricamente, el PGA es duro para los jugadores españoles. Manuel de la Torre fue el primero, hace 60 años, en pasar el corte de un torneo que nació en 1916 y que ha visto participar a 15 españoles con 121 presencias totales. De hecho, para demostrar esa dificultad decir que en el 51% de esas ocasiones el golfista español no pudo jugar las dos jornadas finales. Sergio lleva cinco años sin pasar el corte y Rahm falló en dos de cuatro y atesora un cuarto lugar final en 2018 como mejor resultado. “El objetivo es ganar siempre. Y si tengo que elegir una semana, elijo esta”, dice el vasco, uno de los favoritos en las apuestas (junto al norirlandés Rory McIllroy y los estadounidenses Justin Thomas y Jordan Spieth) que también mira un poco más allá en el año: “Me encantaría darle una medalla de oro a España en los Juegos de Tokio”.
Todo listo para una hermosa batalla en un campo muy largo que mira con deseo Bryson DeChambeau, el bombardero de California, y al que el número uno del mundo, el norteamericano Dustin Johnson (que jugará en los dos recorridos iniciales con Sergio y el irlandés Shane Lowry) llega con muchas dudas. Las que no tiene Jon Rahm, que comparte terna hoy y mañana con el inglés Tommy Fleetwood y el estadounidense Patrick Reed, respecto al
uso del láser.