María Horrach “La herida de mi hijo aún continúa abierta”
Se cumplen cinco años del fallecimiento de Luis Salom y su madre habla de él al tiempo que lamenta “la falta de humanidad” que mostró MotoGP por continuar en Italia tras la muerte de Dupasquier.
Hoy se cumple un lustro de la muerte de Luis Salom y en un conversación con su madre, María Horrach, para recordarle, surge la figura recién caída de Jason Dupasquier. A MotoGP le faltó humanidad el pasado domingo y hace cinco años, según la mamá de Salom.
—Tenía muchas ganas de esta entrevista cuando la concertamos, para homenajear a Luis cinco años después de su pérdida, pero se hace duro tras lo acontecido el pasado fin de semana en Italia…
—Normal, se nos ha cortado el rollo a todo el mundo.
—Yo no entendí que se corriera en esas circunstancias y hubo pilotos, como Petrucci, que se sintieron sucios por hacerlo. ¿Qué piensa usted al respecto?
—Pienso lo mismo que ellos. Lo pensé también el fin de semana de mi hijo. Sé que se dijo que yo pedí que continuara el gran premio y eso es una gran mentira. Cuando me acababan de comunicar que mi hijo había fallecido, alguien que había a mí lado, no recuerdo quién era, tenía una persona al teléfono que me estaba preguntando si yo quería que continuara el gran premio. A mí me acababan de decir que mi hijo había fallecido y dije que, por respeto a mi hijo y a los demás pilotos, el gran premio no debía continuar, pero que la decisión la tomaran ellos y que estuviera encima de sus conciencias. Y esta semana he vuelto a sentir lo mismo. Faltó humanidad con mi hijo y Dupasquier.
—¿Cómo seguimos la entrevista a partir de aquí?
—No sólo he sentido un gran dolor por la pérdida de otro chico que lo estaba dando todo por el motociclismo sino por una familia que ha quedado rota para el resto de su vida y que nada volverá a ser igual para ellos. No se ha respetado ese dolor.
—Algo que no se cura nunca, ¿verdad?
—Ahora hace cinco años de la pérdida de Luis y continúo igual. Es como tener una herida abierta. Te acostumbras a tenerla siempre sangrando, pero no deja de doler. Ese dolor siempre es tuyo.
—Esto debía ser un homenaje a Luis. Van ya cinco años sin él. ¿Qué caló más, la persona o el piloto?
—El piloto hizo el trabajo y dejó a la persona en el recuerdo.