La pasión de Gracia
El navarro se enfrenta al club de sus amores ● Partido de confirmación para el Valencia ● Arrasate, cinco bajas
Una espina que tiene clavada Javi Gracia de su etapa como futbolista es no haber defendido la camiseta de Osasuna (“Si hubiera podido jugar toda mi carrera allí, lo hubiera hecho”, confesó tras colgar las botas); una pena que le acompañará siempre es no haberle podido mantener en Primera el año que fue su entrenador (“Es el club de mi tierra, de mi casa, de mi familia...” dijo ayer).
Gracia se enfrenta por primera vez a Osasuna desde que dejara su banquillo y no es el único que tendrá esta tarde el corazón algo dividido. Le pasará a Nacho Vidal, media vida como che; a Lato, que ‘volvió’ a nacer como futbolista de rojillo; sin olvidarnos de Braulio Vázquez, con pasado por Mestalla y hasta un hijo, Jesús, a las órdenes de Gracia. Pero ninguno estará para romanticimos cuando ruede el balón. Valencia y Osasuna se juegan mucho; unos la confirmación de su resurgir, otros, romper la racha de 12 jornadas sin ganar.
En sus confesiones en Tajonar, ni Arrasate ni Braulio ven al Valencia como rival por no descender. Pero la clasificación dice que los de Gracia aún están ahí. Pero su última victoria en Valladolid, más las coperas ante Yeclano y Alcorcón, les hace ver la vida en color. El Valencia parece que le está cogiendo el pulso a la temporada y, además de sensaciones, recupera efectivos para la causa: Gayà, Gabriel Paulista y Gameiro. Los dos primeros apuntan al once, el francés ampliará el fondo de armario. Carlos Soler también estará en la convocatoria, pero Gracia quiso jugar al despiste: “No arriesgaremos”.
Arrasate se presenta en Mestalla con cinco bajas y echará mano de Unai y Roncaglía para formar la defensa. Los rojillos sufren el mal de las áreas (de los que más goles reciben y de los que menos hacen), pero vienen de dejar helado al Real Madrid (0-0) y de cazar pericos en Copa.