Suso encuentra su mejor versión bajo la luz de Lopetegui
El gaditano es decisivo en Nervión
Hace casi un año que Suso aterrizó en Nervión bajo el expreso deseo de Julen Lopetegui. Titubeó en su comienzo, motivó el cambio de banda de Lucas Ocampos y terminó siendo una baza decisiva en este Sevilla. Su disparo casi dibujado ante el Alavés dio tres puntos y pintó una nueva realidad: su peso en el equipo se multiplicó y es intocable para un técnico que no dudó en apostar por su talento. Suso también salvó un punto en el último derbi y firmó el triunfo en Mestalla. Brilló en las recientes victorias ante el Villarreal y la Real Sociedad y su nivel de juego llama a las puertas de la Selección española, la que precisamente ya le entregó hace años su primera oportunidad de la mano del propio Lopetegui. Su desafío vuelve a estar sobre la mesa.
“Estaba el niño en la guardería con los instrumentos y está todo el día con la guitarra. Así que eso, pues guitarra...”, justificó Suso su celebración con dedicatoria a su hijo tras el imparable disparo que batió a Pacheco en Vitoria. “Hicimos un buen partido, nos faltó algo de tranquilidad en la segunda parte, pero lo importante era ganar”, aseveró sobre lo ocurrido en el césped. Su papel es casi intocable para Lopetegui, que ya ubicó de forma constante a Ocampos en el flanco izquierdo para dejar ese lado diestro al gaditano. Ahí luce su pausa, su capacidad para detener el tiempo y ejecutar una visión de juego que marca diferencias en Nervión.
Mercado. Suso llegó al Sevilla a finales de enero del pasado año. La inversión de Monchi partió de una cesión y se cerró con un traspaso definitivo este pasado verano. Las dudas existentes, las mismas que llovieron sobre En Nesyri, el otro refuerzo de invierno, quedaron en el olvido con su compromiso y un rendimiento creciente.
Lopetegui traza las líneas de mejoría de su Sevilla con la irrupción del mejor rendimiento del gaditano y a la espera de poder ejecutar rotaciones en próximas citas ante el duro calendario venidero. Suso cumple un año en Nervión con un mensaje de ambición y un salto cualitativo en su juego. Su factor imprevisible dio aire a Lopetegui e impulsó por enésima vez una realidad: la apuesta de Monchi fue certera.