Resbalón del Almería
Un patinazo de Makaridze permite al Sabadell empatar de tiro libre directo
Otra jugada surrealista en el estadio de los Juegos Mediterráneos, escenario preferido de Valle-Inclán, con el penalti más famoso de Segunda División en un Almería-Cádiz en 2007 o el tanto de Aranzubía para el Depor en 2011. Ayer fue un resbalón, que le costó al Almería acercarse al liderato. En el 83’, Makaridze se resbaló en un saque de puerta, tocando el esférico dos veces y señalando Ocón Arráiz un libre directo dentro del área. Hernández no perdonó, anotando por el palo izquierdo, donde estaba Centelles, que se giró de manera inexplicable.
Fue el de Antonio Hidalgo uno de los mejores equipos que ha visitado el estadio de los Juegos Mediterráneos. El conjunto arlequinado quiso quitarles el esférico a los locales, no se encerró y buscó, al igual que los rojiblancos, presionar arriba al rival, por lo que se vio un partido alegre y abierto. El Almería, con Ivanildo como titular, no se sentía cómodo en ese primer cuarto de hora. Un obús de Álvaro en el minuto 24 en un libre directo tuvo que ser repelido por Makaridze.
Con el Almería en su salsa apareció Samu Costa en ataque. A la media hora ya avisó en un saque de esquina y unos minutos más tarde ejecutó en otro. El balón, botado por Carvalho, rebotó en el debutante Ivanildo, mala salida de Mackay incluida. El luso entró con la fuerza de un camión y la ilusión de un pipiolo de 20 años para empujarla con la testa y marcar su primera diana en España.
En el 65’, un centro de Ángel fue cabeceado por Óscar Rubio ante la pasividad de Centelles. Cuando su equipo más lo necesitaba, apareció Sadiq. Lazo fue el socio perfecto para el nigeriano. Condujo una contra y cuando el ‘9’ encontró el hueco entre Coch y Jaime le filtró un buen esférico para que el africano no perdonase. El Sabadell siguió sin rendirse y volvió a golpear tras el mencionado resbalón de Makaridze. Un accidente que resta dos puntos a su equipo en esta dura carrera por el ascenso.