Las lesión en la final de Milán le dejó sin la Euro de 2016
También se lesionó en la de Kiev
Las lágrimas de Dani Carvajal en las finales de Milán (la Undécima)y Kiev (la Decimotercera) dieron la vuelta al mundo y no fueron de alegría. O por lo menos, algunas fueron muy agrias. Porque parte del terrorífico historial de lesiones del leganense acaeció en esas dos grandes citas. Se rompió contra el Atlético y también contra el Liverpool. Y en ambas ocasiones salió llorando presa de la frustración...
La razón es que no sólo se iba de una final de Champions en camilla, dos veces además, es que peligraba de rebote el premio de un verano con la Selección. La lesión de Milán (de grado II en el psoas y que le frenó durante un mes) le dejó sin poder estar entre los 23 elegidos por Del Bosque que jugaron la Eurocopa de 2016 en Francia.
Un mal trago que seguro pasó por la cabeza del lateral cuando, esta vez a punto de otear el Mundial de Rusia, su cuerpo dijo basta... en el minuto 36 de la finalísima de Kiev. Esta vez la dolencia fue en un isquiotibial, pero Lopetegui peleó para que Carvajal fuera a la cita mundialista, la primera para el madridista, ausente en Brasil 2014.
Tanto fue así que el técnico vasco se la jugó y le incluyó en la convocatoria sin estar aún recuperado del todo. La prueba es que Carvajal no pudo ser alineado en el debut (3-3) contra Portugal (el dos fue Nacho) y su debut mundialista tuvo que retrasarse al siguiente envite, el 1-0 a Irán.
El lateral titular del Madrid y de la Selección tuvo que disputar el torneo ruso diezmado y falto de ritmo. Otro capítulo más en un historial de lesiones que amenaza de nuevo a Carvajal si finalmente tenemos Eurocopa este verano...
En 2018 Se rompió ante el Liverpool y sí llegó al Mundial, pero diezmado