Italia recobra la ilusión
Mancini ha metido a cada jugador en su sitio favorito del dibujo y ha dejado con la pelota en los pies a los que más talento poseen
La sensación que había en Italia cuando por primera vez en 60 años no se clasificó a un Mundial era de que se había acabado el fútbol. Les habían quitado la pelota. Pasar de eso a la ilusión actual, generada a golpe de récords (la Azzurra nunca había ganado 11 partidos seguidos ni había terminado una fase de clasificación con pleno de victorias) se debe al trabajo de Mancini.
El buen rollo es a un nivel tan alto que Belotti e Immobile, que se juegan el puesto de delantero centro, se animan y buscan si uno marca un gol y el otro está en el banquillo. Una felicidad que nace de la juventud. Bajo Mancini se estrenaron 33 nuevos azzurri y Zaniolo, por ejemplo, fue convocado sin haber jugado en la Serie A. La lesión en la rodilla le impidió al talento de la Roma acudir a la Eurocopa, pero el entrenador completó la delantera con otro joven, Raspadori (21 años).
En la delantera se espera mucho de Insigne, que cerró la temporada con 19 goles, y de Chiesa, una de las pocas buenas noticias en el año de la Juve. Immobile y Belotti seguirán peleando por el otro puesto, con el de la Lazio favorito. La única cuestión sobre esta Italia es su falta de experiencia, aunque la
Nazionale construyó su leyenda cuando el nivel sube. Habrá que ver cómo reaccionan los de Mancini, pero Italia tiene todo el derecho para sentirse una de las mejores selecciones de la Euro y soñar con nuevas "notti magiche" en el Olímpico de Roma. Hace tres años, ni el más optimista lo habría imaginado...