Un soplo de aire fresco
Si hay un motivo para comprar una PlayStation 5 ese es Ratchet and Clank: Una Dimensión Aparte
Con más de medio año ya de vida la PlayStation 5 aún no tiene un catálogo que justifique por sí mismo su adquisición. Ratchet and Clank: Una Dimensión Aparte viene a llenar parte de ese vacío, con permiso de Demon’s Souls, ya que es el primer título de la compañía japonesa pensado para la nueva generación.
El estudio que ha llevado a cabo el trabajo ha sido como no Insomniac Games, que han desarrollado títulos de la saga desde 2002 y más recientemente los Spiderman, cuya influencia en el sistema de juego es notable aquí.
Deprisa, deprisa. La nueva aventura de Ratchet es por una lado continuista con la dinastía y por otro, rupturista con el aprovechamiento de los recursos que ofrece la nueva máquina. La incorporación de las capacidades hápticas del DualSense están bien implementadas en el desarrollo de la aventura, así como el sonido 3D.
Pero donde luce con mayor intensidad Ratchet and Clank: Una Dimensión Aparte es en su jugabilidad. Sus catorce horas de partida son un manual de cómo se debe hacer un juego, con un ritmo trepidante y un diseño de niveles espectacular que no da tregua al usuario en ningún momento.
Aunque se trata de un título fundamentalmente de acción hay grandes dosis de plataformas y ciertas esencias de exploración que llevan sin demasiado esfuerzo a completar los coleccionables presentes. También unas pocas misiones secundarias que amplían un poco el arco principal en una historia que encaja bien con el universo Ratchet.
Gráficamente es un portento, no tiene caídas de rendimiento y algunos de los escenarios son de lo mejor que se ha visto en una consola.