“El tomate, el aceite y el jamón vienen de España”
Luis Nieto (1970, Madrid) es cocinero de la RFEF desde hace más de cuatro años. Y lleva tres años viajando con la absoluta femenina.
—¿Cuál es la clave para alimentar a esta Selección? —Trabajar con muchas ganas y pasión. Cada día que vengan al buffet vean algo diferente. Es lo que a ellas les encanta. —¿Cuál diría que son los alimentos básicos aquí?
—El tomate rallado, el jamón ibérico y el aceite de oliva. Son tres ingredientes fundamentales.
—¿Esa base de productos ha venido de España?
—Sí. Estuvimos aquí hace dos meses y medio y vimos que la calidad del producto no era muy buena. Decidimos traerlos.
—¿Cuál es el alimento prohibido?
—El picante. No podemos tocarlo, hay que evitarlo. Y también evitar en la medida de lo posible las especies que puedan dañar la digestión. Por hacerlas más suaves.
—¿Esta Selección es más de carne o de pescado? —Depende del día, depende del pescado que le pongas. Lo que puedo asegurar es que comen bastante bien. Ellas nunca saben el menú que hay hasta que llegan, es una sorpresa cada día. El menú lo hace el doctor con el míster. Y me lo pasan a mí.
—¿Tienen las jugadoras día libre para comer lo que quieran? —Muy pocos. Siempre la comida está ajustada. En campeonatos no podemos levantar la mano. Un día lo haces y ya hay un poco más de peso. La bollería es algo prohibido. La que hacemos es toda muy saludable, muy fitness. Tortitas de avena con plátano, bizcocho de pancake… les apasiona. —¿Y qué pasa con productos como el chocolate? ¿Y los refrescos?
—Pueden comer, pero a partir de un 70%. El gas no es que esté prohibido, es que ellas tienen una bebida asignada que es el agua, zumo de naranja natural y de manzana.
—Y la fruta, ¿la han traído desde España?
—Comen mucha y muchos vegetales. Son de aquí, porque podemos traer productos desde España pero de larga duración. La fruta es muy perecedera.
—Hay mucha andaluza, ¿el gazpacho triunfa?
—Lo empecé a hacer en este hotel y hoy lo han puesto como receta en su propio restaurante. He tenido que ayudar al chef porque todavía no controlaba bien las cantidades. —¿Cuál diría que es su tipo de cocina?
—De casa. Que cuando haga unas croquetas te recuerden a tu madre. El arroz con leche, a tu abuela.