La Copa de Cadenas
Barça-Cuenca y Ademar-Granollers, semifinales
EI entrenador leonés Manolo Cadenas (67, Valdebimbre) es historia viva del balonmano español. Como entrenador del Ademar afronta hoy una nueva edición de la Copa Asobal, que para él es su competición fetiche: “Como técnico del Teka gané en Ibiza la primera edición de la Copa Asobal; también la he ganado con los ademaristas. Por todo lo que representa esta competición siempre es especial”.
Ahora bien, el leonés no oculta un poso de disgusto por la fórmula actual: “Antes la Copa Asobal la jugaban los cuatro mejores de la primera vuelta en diciembre, y tenía el premio de clasificarte para Europa. Ahora mismo ese plus se ha retirado, y las fechas no son las mejores, porque los equipos tienen un calendario saturado. Por ejemplo, el Granollers ha jugado la eliminatoria de Copa del Rey el jueves; podría tener que disputar dos encuentros ahora, ojalá que no, porque juega contra nosotros hoy, y el martes afronta un encuentro de la Liga Europea. Una locura”.
Cadenas también ha estado en los banquillos del Barça y del Granollers, en tres de cuatro participantes, y aunque esta
Copa ahora no tenga premio “siempre da prestigio jugar una final, porque ganársela ahora al
Barça no parece muy probable, porque el Cuenca y el
Granollers llegan agotados por sus partidos del jueves, nosotros con mucho lesionados y casi con Santista y Boskos descartados, y los barcelonistas son superiores al resto, y llegan frescos”. Eso sí los lesionados del Barça están en el extremo izquierdo (Ariño y Wanne) lo que permite que Ian Barrufet (campeón de Europa juvenil e hijo del exportero azulgrana) pueda debutar el fin de semana con el primer equipo: está en la convocatoria.
El Granollers es el rival del Ademar esta tarde, y llega, como el Cuenca, eliminado de la Copa del Rey, “pero eso sólo significa que tal vez acuse el cansancio; su primera vuelta, como la del Cuenca, ha sido formidable, por resultados y juego. Tal vez el Ademar tenga sus opciones esta tarde, pero está limitado por las lesiones”.
El Ademar se jugó el billete para la Copa del Rey el miércoles en Pamplona, y levantó seis tantos que llevaba de ventaja el Anaitasuna: “En ocasiones funciona la charla en el descanso, apelar al amor propio. Pero no sé por qué es a un partido entre equipos de la misma categoría; jugar en casa siempre es un plus que han pagado el Granollers y el Cuenca”. Es el plus que tiene ahora el Ademar, con su público.