El Madrid gana por KO
Los blancos dinamitan el duelo en un tercer cuarto espléndido: 80-53, minuto 29 ● Campazzo dirige: 9 asistencias ● Musa, Yabusele y Poirier, muy bien
Hace un año, en el estreno de Chus Mateo, cuando el proyecto braceaba para mantenerse a flote, el Madrid pasó de cuartos en la Copa con un triunfo al límite frente al Valencia e hincó la rodilla horas después ante el Unicaja. Doce meses más tarde, el Real regresa a la final, la número 52 de su historia en el torneo del KO. Despedazó al Valencia en el tercer cuarto (80-53, minuto 29) y va a por un título que le es esquivo desde 2020, meses antes del adiós de Campazzo, MVP entonces. El argentino, el que dirige la orquesta (9 asistencias), anda de vuelta. Tras un inicio pletórico de temporada y un ligero bajón posterior, el base repunta en plena Copa para ayudar a crecer a su equipo durante el torneo.
El Madrid no llegaba boyante a la Costa del Sol, pero ha dado dos pasos, este segundo con amplia zancada, y recupera sensaciones colectivas. Más allá, gran labor de Musa, Yabusele y Poirier, y de Deck. En el Valencia, solo Brandon Davies (18 puntos) y, eliminado por faltas, duró 14:37. Y si quieren, la fuerza de Justin Anderson y el empuje de López-Arostegui, que, eso sí, marró la acción de la tarde, la del punto de inflexión.
De salida, cuando aún existía pulso, vimos más ritmo e intensidad que efectividad, sobre todo en el Valencia; pero es que la batalla que se planteó era muy física. La pintura parecía un campo de minas y en el minuto 12 habían caído ya ocho tapones, cuatro por escuadra.
Los blancos salieron centradísimos. Lo mejor del Valencia es que, pese a ir a la lona en pleno padecimiento ofensivo (solo dos dianas, dos triples de Davies, de 14 intentos), se levantó: del 19-6 al 30-27. Davies iba a triple por falta, tres y tres. Bien en la puesta en escena contra Tavares, aunque esa acumulación de personales (la cuarta, una antideportiva, al empezar el tercer cuarto) le sacó de plano. El pívot madridista comenzó metido, pero todavía lejos de su forma óptima. Quizá por eso se cargó igualmente de faltas, la tercera al arrancar la segunda parte, cuando su equipo iba a dinamitar la semifinal con Campazzo al mando.
El Madrid volvía a volar, como en el primer trimestre del curso. Triple de Musa, 2+1 de
Inflexión LópezArostegui marró un mate y el Valencia se hundió
Yabusele, acierto de Deck, de Poirier, nuevo 2+1 del Facu y… 13-0 que le bajaba el telón al bloque taronja. El partido se abrió en canal, un +27 (80-53).
Hubo una acción que transmitió la sensación de jugada clave en directo, pero a posteriori lo parece aún más. En plena reacción valenciana, LópezArostegui, que venía de meter un triple y de un muy buen tramo, robó un balón y encaró solo la canasta para el mate: fallo de cálculo y la bola salió despedida (era, no llegó, el 42-41). La réplica inmediata, un 2+1 de Musa, triple de Hezonja y tapón de Poirier. De casi igualar, al 48-39 con el bocinazo. A continuación, el aluvión merengue del tercer periodo: 32-16. El Madrid está en la final por KO, quebró a un rival muy físico con un nuevo giro de guion. La Copa no entiende de esquemas.