Kylian Mbappé: entre el castigo y la redención de Luis Enrique
■ Tres semanas después de anunciar su salida del PSG este próximo verano, Mbappé está viviendo la doble cara del fútbol. Ya se sabe que a los futbolistas hay dos cosas que no les gustan: una es la retirada (o la marcha de un equipo grande a otros) y la segunda es estar sentado en el banquillo. Y es esa segunda parte la que está viviendo ahora el francés.
Desde el pasado 15 de febrero, fecha en la que se oficializó su salida por parte del equipo parisino, Kylian ha participado en cuatro partidos, siendo tres de la Ligue 1 y uno de Champions. De los tres encuentros de competición liguera, en uno ha sido titular (ante el Stade Rennes), siendo sustituido en el minuto 65, con el PSG perdiendo (posteriormente los parisinos empatarían de penalti). En otro, ante el Nantes, comenzó en el banquillo, jugó 28 minutos (marcó un tanto) y en el último, ante el Mónaco, Luis Enrique le sustituyó en el descanso con empate a cero en el marcador… El de Bondy recorrió el estadio Luis II sonriendo, dando casi una vuelta de honor (militó cuatro campañas en el conjunto monegasco, desde 2013 hasta 2017), haciéndose selfies y viendo la segunda parte con su madre en la grada.
Preguntado por esta actitud, Luis Enrique ha ido soltando perlitas sobre este asunto: “Puede ser que sí, puede ser que no. Quién sabe…”. Pero todo cambió ante la Real Sociedad: autor de dos goles, con su actuación le dio el pase a cuartos al PSG, y ha variado la opinión de los aficionados parisinos, que quieren seguir disfrutando de él hasta su marcha... Con todo, se debate entre el castigo y la redención.