Brahim, retos de cartón...
Retraso. Vaya por delante que Brahim es un jugador extraordinario y no lo dice un servidor, sino cualquiera que vea fútbol y también por supuesto Luis de la Fuente. Por eso lo fichó el City siendo un crío. Por eso el Madrid luego. Por eso el Milan lo tuvo prestado y peleó porque no regresara al Bernabéu. Con 24 años y el desparpajo que atesora, merecía un hueco en la Selección mucho antes que ahora. Seguramente estuvo cerca. Pero la realidad es que en el Madrid tampoco se ganó el puesto nunca y eso ha retrasado su llamada y ha precipitado una decisión que es difícilmente comprensible: jugar
con Marruecos.
Margen. Marruecos es semifinalista del último Mundial y la número 12 del ranking FIFA. Ha disputado dos de los últimos seis campeonatos del mundo y no gana un título desde la Copa de África de 1976. En la última edición, celebrada este mismo año, le eliminó Sudáfrica en octavos. Tiene como desafío organizar la próxima Copa de África en 2025 y el Mundial de 2030 junto a España y Portugal. Parecen retos muy menores para un jugador incipiente del Real Madrid; o al menos no inmediatos.
Raro. Queda un año para el primer partido serio de los marroquíes, que tienen a Zambia, Níger, Congo, Tanzania y Eritrea como rivales de su grupo de clasificación mundialista. En su debut internacional le esperan amistosos ante Angola y Mauritania. Muy poca cosa. Sinceramente, había tiempo de sobra para que Brahim y España se encontraran. Era lo lógico, lo natural. Pero no ha resultado así y todos pierden. También él.
Hoy descubrimos a... Rodrigo Mora (2007). Ya está definida la Final Four de la Youth League, la Champions juvenil, y uno de los que la jugará es el Oporto. Muy buen equipo, entre sus jugadores destacados está este menudo mediapunta, autor de dos goles en cuartos de final ante el Mainz. Puro talento, visión y calidad para su pequeño cuerpo, es imposible no quedarse prendado de él.*
Le esperan amistosos ante Angola y Mauritania; había tiempo para España...