El Tourmalet de Nacho: Mallorca y Mánchester
Tras el ‘banquillazo’ ante el City, doble oportunidad
Si no es un ‘ahora o nunca’, se le parece mucho. Porque la temporada expira y tras ella, el momento de tomar una decisión. Firmar la renovación. Decidirá Nacho, porque para el club pertenece a ese selecto grupo de futbolistas que se han ganado el derecho a decidir. Pero el capitán quiere sentirse útil. No es titularísimo y el varapalo ante el City, con Tchouameni jugando antes, ha escocido. El factor diferencial es que el francés no estará en el Etihad (sancionado), así que Nacho afronta dos oportunidades: Mallorca y Mánchester. Le urge reivindicarse, convencer. Un Tourmalet de cinco días... que apunta a crucial.
Pero piano piano. El capitán piensa en Son Moix. Un partido fundamental para el equipo, porque la diferencia con el Barcelona es de 8 puntos y para él también, porque la irrupción de Tchouameni como central y el casi inminente regreso de Militao han encarecido los minutos. Así que todo empieza en Mallorca. Su reválida.
El pico del puerto será el miércoles: la vuelta contra el City. Una oportunidad idónea para demostrar que sí podía secar a Haaland, frenar al City, que no era necesario tirar de Rüdiger. Que él está para estos partidos, porque sigue estando al nivel que exigen. “No me preocupa la ausencia de Tchouameni, tenemos a Nacho”, dijo Ancelotti. Un buen papel en estos dos partidos acallaría el runrún, hincharía su status y reforzaría la confianza. Sería un golpe sobre la mesa.
En cuanto a su futuro, la situación es clara: tiene la oferta de renovación sobre la mesa y todo depende de él. Así de sencillo. Es el futbolista quien decide si continúa un año más. Si es lo que quiere, o no. Pero por el Madrid no habrá problemas (“si mañana quisiera firmar, podría”, aseveró en Arabia). Lo que Nacho debe sopesar es que el año que viene estarán Rüdiger, Militao, Alaba y Rafa Marín (el club cuenta con que regrese). Debería competir con ellos. Así que el dilema es si se ve con fuerzas. Por eso y más, estos cinco días son claves: para mandar un mensaje a la afición y darse un golpe en el pecho. Si no es un ‘ahora o nunca’, sí, se le parece mucho.
Renovación El capitán duda con su futuro, pero la decisión está en su mano