Ilusión por el Giro
Juanpe López estrena su palmarés ante gran parte de los favoritos de la Corsa Rosa
Mientras el Real Betis apura sus opciones de volver a competir en Europa la próxima campaña, un verdiblanco de cuna volvió a brillar en una carrera italiana, donde parece que su mejor versión siempre sale a flote. Ayer, en la tercera etapa del Tour de los Alpes, Juanpe López al fin cumplió ese objetivo que se truncó el año pasado por culpa de las lesiones: conseguir su primer triunfo profesional. El de Lebrija (26 años) alzó los brazos en una jornada épica, marcada por una intensa lluvia que acompañó a los corredores de principio a fin, como mejor sabe, destapando el tarro de las esencias en la montaña, después de que el pelotón arruinase el intento de exhibición de Filippo Ganna tras más de 100 kilómetros escapado en solitario.
Fue ahí, en un menú final de cuatro puertos consecutivos, donde pasó a la acción para alcanzar al italiano Giulio Pellizzari, que en la penúltima ascensión rodaba en cabeza. Ya en la última dificultad, el del Lidl-Trek cambió el ritmo en el explosivo Pillberg (3,2 km al 10%) a falta de 2 km de la cima, una ventaja que consolidó posteriormente en un descenso sumamente delicado por la cantidad de agua acumulada. Con esa mezcla de rabia y emoción celebró el éxito en la meta austriaca de Schwaz para, de paso, situarse como líder de la general.
Una sensación que Juanpe, curiosamente, no experimentaba desde el Giro de Italia 2022, cuando fue uno de los grandes animadores de la carrera al portar la maglia rosa
Liderato
Juanpe no comandaba una general desde el Giro de Italia en 2022
durante diez días. Después, finalizó como mejor joven de la carrera y con su primer top10 en una gran vuelta (10º). Ahora, deja atrás las dudas, los malos momentos del año pasado, fruto de una fractura de clavícula durante el invierno que lastró su rendimiento para el resto del curso.
“Fue un día increíble para mí, mi primera victoria profesional, pero fue un día realmente difícil para todos. Empezamos con cuatro grados y lluvia, ha sido uno de los días más fríos de mi vida sobre la bici. Iba con el objetivo de no pasar frío, pero era imposible, así que al final cambié al otro objetivo, que era ir a por la etapa. Al principio no me sentía muy bien, no sentía mis manos, no sentía tan bien el resto de mi cuerpo. Al final, podía sentir que mis piernas estaban bien, lo cual era importante”, analizó el de Lebrija al término de la etapa.
Todo lo negativo queda en el pasado, quizás para no volver. Y es que esta victoria, más allá de ser la primera de su palmarés profesional, tiene un significado anímico muy importante. Si quitamos de la ecuación a los ausentes Tadej Pogacar y Cian Uijtdebroeks, cabe señalar que Juanpe batió ayer al resto de grandes favoritos al podio del próximo Giro (4 al 26 de mayo), honor que a priori corresponde a corredores como Geraint Thomas (2º tras Roglic en 2023), Romain Bardet y Ben O’Connor, entre otros. Hoy, nueva ración de montaña con seis puertos. Es momento de empezar a soñar. Y seguro que Juanpe empieza a creérselo.