Como usado es una buena opción
La segunda generación del BMW X5 cotiza alto en el mercado de segunda mano. ¿ Harán las restricciones de circulación a los diésel que este SUV tan deseado se vuelva más accesible?
BMW DEJÓ CLARO con la presentación de su primer SUV en 1999 por dónde circularían los nuevos vehículos de tracción integral. Por primera vez, no primarían las cualidades offroad u otras características como la reductora, sino los tiempos por vuelta en el mítico Nürburgring. Desde entonces han sido muy claros al priorizar las cualidades dinámicas de sus SUV.
Hoy ya está en la línea de salida la cuarta generación. Si su equipamiento es alto, su precio de compra alcanzará fácilmente las seis cifras.
Para quienes no cuenten con una economía tan boyante, tienen una buena alternativa en la segunda generación de este modelo, llamado internamente E70. Salió al mercado allá por 2006 y dio un salto de gigante en cuanto a calidad y refinamiento respecto al modelo antecesor. La abultada gama de motores de gasolina parte con el 3.0si de 272 CV y finaliza con los 555 del deportivo X5 M. En cuanto a las opciones diésel, siempre se recurre al mismo 3.0 litros de seis cilindros en línea. Según la versión, rinde de 235 a 381 CV de po- tencia. Mientras que los motores gasolina ofrecen consumos en la órbita de los 15 litros, los diésel lograban quedarse por debajo de los 10 l/100 km. Por eso, fueron los más demandados. Al menos, cuando no había restricciones de circulación a la vista. Cumplen con la normativa Euro 5 y, por el momento, sí pueden acceder a grandes ciudades como Madrid. Quien viva y se mueva fundamentalmente por zonas rurales, tendrá en estas versiones un SUV lujoso y accesible. Estos motores diésel pueden superar