PRIMER CONTACTO Citroën C5 Aircross El efecto oh là là llega al mundo SUV
Con 130 CV y asociado al cambio automático, esta nueva combinación mecánica sienta de maravilla al Citroën C5 Aircross
EL MUNDO DEL AUTOMÓVIL ESTÁ EN UNA TRANSFORMACIÓN continua. Quién iba a pensar hace diez años que la gasolina tendría tanto protagonismo. Era difícil de prever hace una década, pero ya está aquí el cambio.
Los motores gasolina cogen cada vez más protagonismo, incluso en la categoría de los SUV, con independencia de su tamaño. Por eso Citroën ahora aumenta la gama del C5 Aircross con la llegada de un propulsor Puretech de 130 caballos, que culmina la parte inicial de su gama gasolina y ahora se asocia a un cambio automático. Se trata de un motor que se apunta a la cada vez más extendida moda del downsizing, es decir, baja cilindrada para reducir consumo y emisiones. De hecho aquí alcanza una de sus máximas expresiones, pues solo necesita 1,2 litros de cubicaje para redir los 130 caballos de potencia, con un par máximo de 230 Nm disponible desde 1.7650 revoluciones. Estas son sus credenciales, veamos ahora como baila pulsando el botón de arranque.
Comienza en silencio, mucho silencio y bien aislado de vibraciones. A partir de 2.500 revoluciones empieza una suave estirada, que se mantiene hasta las 4.500 revoluciones con fuerza y aguanta hasta 6.000 ya sin tanta contundencia. Lo mejor es llevarlo entre esas 2.500 y 4.500, que es cuando más a gusto se siente, aprovecha el par motor y contiene el consumo por debajo de los 7 l/100 km. Autovías y autopistas son los hábitats donde más disfruta, sobre todo porque su suspensión está claramente enfocada al confort. En tramos virados, los balanceos de la carrocería sacan a la luz su elevada distancia libre al suelo
y unos tarados tirando a blandos. Eso sí, el confort de los pasajeros es de los mejores de clase, también por espacio en las plazas traseras. Gracias al sistema Grip Control, que optimiza la motricidad del tren delantero, y a esa distancia libre al suelo de 230 mm, este C5 Aircross se puede salir por pistas de tierra sin ningún problema. Una muestra más de versatilidad, como lo son las 81 configuraciones que permite un maletero cuyo volumen de carga parte de los 580 litros.
Bien posicionado en precio frente a sus rivales, el Citroën C5 Aircross
es la opción de SUV perfecta para los que buscan un coche cómodo, capaz y con gran sentido práctico. En estas virtudes, la marca del doble chevron cada vez se está especializando más. Además, pronto tendrá versión híbrida.
Los precios del C5 Aircross con este motor arrancan en 20.300 euros, aunque la versión tope de gama que he probado, asociada a un cambio automático de 8 velocidades, se va hasta la frontera de los 30.000 euros. Es un motor eminentemente suave, que tiene en el silencio y la falta de rumorosidad sus principales virtudes al arrancar. Por este motivo, tengo claro que este C5 Aircross está hecho para rodar en familia y hacer kilómetros con el pasaje contento. Las plazas traseras, además, son de las más grandes de su categoría (tres adultos viajan sin problemas y el diseño de los asientos libera mucho espacio para las piernas).
Hyundai Tucson, Kia Sportage, Seat Ateca e incluso Renault Kadjar son los grandes rivales de este Citroën, que pone en el confort su bandera para ganar la batalla de los todocaminos generalistas.