Peugeot 508 SW Hybrid: ¿una opción bastante sensata?
Si te estás planteando la compra de un híbrido enchufable, atento a la propuesta de este Peugeot 508 SW Hybrid: es lógico, eficiente, práctico y está bien equipado. Te contamos si compensa
YA NO HACE FALTA CONVENCER A NADIE de lo sensato que es a día de hoy comprarse un coche híbrido enchufable. Pero es cierto que no son para todo el mundo. ¿Quieres saber si este 508 familiar es el indicado para ti? Te lo cuento con todo detalle.
Este coche me parece una de las mejores opciones si vives en una gran ciudad y a diario recorres unos 30-40 km aproximadamente. Si es así, circularás siempre en modo eléctrico, ya que lo cargarás en casa por la noche sin preocuparte de los tiempos de carga. Y cuando tengas que viajar, tampoco te hará falta estar calculando dónde hay puntos de car
ga, porque podrás circular sin problemas con el motor de combustión.
Pero vamos a ver qué otras cualidades tiene. Para empezar, algo que salta a la vista: un diseño que no te deja indiferente. Desde luego es un coche que entra por los ojos y, particularmente, esta versión familiar es incluso más atractiva que la berlina. Aunque eso es cuestión de gustos. Lo que es irrefutable es que con sus 4,77 metros de largo, su distancia entre ejes de 2,8 metros y su maletero de 530 litros (casi 1.800 si pliegas los asientos) no vas a encontrar muchos modelos que combinen tan bien estética, espacio y practicidad.
Si estás pensando que un SUV grande le puede plantar cara, quizás estén igualados en espacio y puede que lo supere en imagen y prestigio, pero desde luego no en eficiencia.
Este 508 Hybrid monta un conjunto motor formado por un 1.6 turbo de gasolina con cuatro cilindros y 180 CV de potencia, al que se suma un propulsor eléctrico de 80 kW (110 CV). Entre ambos logran 225 CV y un par máximo de 360 Nm que entrega desde el primer momento que hundes el pedal del acelerador. Y esta es una de las grandes ventajas de este coche, que te transmite una
gran sensación de potencia en todo tipo de circunstancias.
¿La eficiencia es otra de sus grandes ventajas? Depende. Como te decía, donde más partido le vas a sacar es en ciudad, donde se reduce muchísimo el coste por uso al circular siempre en modo 100% eléctrico.
Si sales a carretera, pasados unos 35 kilómetros la batería se agota y hasta los primeros 100 km el gasto medio de combustible se queda en 5,8 l/100 km. A partir de ahí el gasto es de 7,0 litros, que no está mal para un viaje con un motor de 180 CV.
Y, si me permites, te doy un consejo, unos kilómetros antes de llegar a tu destino activa el modo Recharge, que utiliza el motor de combustión para cargar la batería. En este caso el gasto sube a 10,4 litros, pero cuando llegues a la ciudad el gasto será nulo, así que compensa. Para que te hagas una idea, en 30 km de recorrido recarga la batería como para completar 10 km en modo eléctrico.
Y si compras revistas de coches seguro que también te interesa mucho saber cómo va cuando te pones en marcha. En este sentido, te puedo contar que es un coche polivalente: suave si lo conduces con mimo, en el que apenas se nota el momento en que se activa el motor de gasolina y apoyado en un cambio por convertidor de par cuyos saltos de marchas son casi imperceptibles.
Pero, por otro lado, tiene un buen chasis, con una suspensión que sujeta la carrocería con firmeza en las curvas y ofrece distintos modos de conducción para que lo adaptes a tus necesidades o al terreno. Así que dinámicamente no podrás ponerle ni una pega, porque es un coche, firme y con un buen comportamiento. Además, monta un potente sistema de frenos y una dirección que transmite fielmente lo que ocurre bajo las ruedas.
A estas alturas de la película, todavía no te he hablado de su interior. Ac
cedo a él a través de unas puertas sin marco para las ventanillas, que es un detalle que siempre ha sido signo de distinción.
El habitáculo destila modernidad, con un cuadro de mandos completamente digital y una pantalla principal panorámica. Eso sí, quizás hay demasiadas funciones y cuesta acostumbrase a moverse con soltura por su extenso menú.
Antes decía que es amplio. Y eso es cierto, pero hay que reconocer que, debido al diseño y a la caída del techo, la sensación de espacio en la segunda fila no es demasiado buena. Te sientes un poco encerrado y el espacio para las piernas tampoco es de los mejores del segmento.
Respecto a los asistentes a la conducción, el 508 Hybrid viene equipado de serie desde el acabado más sencillo con el que se vende con luces de carretera automáticas, sensor de lluvia, aviso de pérdida de atención por parte del conductor, detector de obstáculos, reconocimiento de señales de tráfico, sensor de vehículos en el ángulo muerto...
Y tampoco echarás en falta nada en el apartado tecnológico y de conectividad, ya que cuenta con navegador de serie, Apple CarPlay y Android Auto.