SUZUKI IGNIS
BAJO SU COMPACTA CARROCERÍA DE ATREVIDO DISEÑO SE ESCONDE UN TODO CAMINO URBANO REPLETO DE INTERESANTES VIRTUDES. ¿LAS CONOCEMOS?
Nunca fue un modelo demasiado popular, pero representaba muy bien el concepto de practicidad. El Ignis, que se comercializó entre 2000 y 2008, vuelve al mercado en febrero de 2017 con una carrocería de sólo 3,70 metros de largo y un diseño muy personal.
Está construido sobre una nueva plataforma que permite que el coche sea muy liviano: sólo pesa 810 kg, por lo que sus discretos 90 CV ya son suficientes para que se desplace de forma 'alegre', especialmente
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E. Alonso si va equipado con cambio manual -hay una caja automática robotizada por 900e de sobrecoste-. Otra de las características del nuevo Ignis es que tiene ciertas aptitudes camperas gracias a sus cortos voladizos -sobre todo el trasero, con un ángulo de salida de 38,8º- y a su generosa altura libre al suelo; de hecho, se ofrecerá en versiones de tracción delantera o total, estas últimas por unos 1.500e más.
Por otro lado, existirán unas cuantas alternativas para personalizarlo, como 8 colores
para la carrocería -combinables con techo en negro como opción- y otros 4 tonos para los guarnecidos del interior. En cuanto a su equipamiento, la versión superior GLX incluye de serie elementos tecnológicos como una doble cámara tras el retrovisor interior que integra el sistema de frenada de emergencia autónoma -detecta vehículos y peatones- y la alerta de cambio involuntario de carril. Además, el Ignis ha obtenido cinco estrellas en las pruebas de choque EuroNCAP y se vende con garantía de 5 años o 100.000 km. Su arriesgado diseño puede gustar o no pero, objetivamente, el Ignis es un todo camino urbano muy completo.