VOLKSWAGEN POLO
SEXTA GENERACIÓN 4,05 METROS DE LARGO 351 LITROS DE MALETERO, 71 L MÁS QUE EL ACTUAL GASOLINA, DIÉSEL Y GAS NATURAL
Evolución lógica La sexta entrega del Volkswagen Polo no sorprenderá desde el punto de vista estético: seguirá la senda marcada por el Golf, salvo en la trasera, que recibe un diseño claramente diferenciado... pero que recuerda al del Seat Ibiza. Frente al actual modelo, la longitud aumentará de forma notable... algo que cada vez es menos habitual en el segmento B. En concreto, se incrementa 7 centímetros hasta alcanzar los 4,05 metros; prácticamente lo mismo que el Seat Ibiza -4,06 m-, con el que comparte la plataforma modular para modelos compactos -denominada MQB A0-. La anchura se situará en 1,75 metros y la altura, en 1,45 m. Muy personalizable Vendrá con numerosas posibilidades de configuración tanto exterior como interior. Habrá tres acabados -Edition, Advance y Sport- y tres paquetes adicionales en opción: R-Line, Black y Style. Además, se podrá elegir entre 14 colores para la carrocería y más de diez tipos de llantas, con diámetros entre 14" y 17". En el habitáculo las opciones serán aún mayores: 17 paneles decorativos diferentes para el salpicadero y la consola central y once tapicerías para los asientos. El más tecnológico Aunque si por algo se distinguirá el nuevo Polo es por la elevada carga tecnológica de la que podrá disponer. Por ejemplo, estrenará una nueva generación del Digital Cockpit, una instrumentación totalmente digital con mejores gráficos que la empleada en el Golf o el Passat. La pantalla central podrá ser de hasta 8", una de las más grandes de la categoría -el nuevo Ford Fiesta puede tener una del mismo tamaño-. Un fuera de serie En lo que respecta a seguridad activa, el Polo también se situará como la nueva referencia del segmento. Desde el acabado más básico dispondrá de asistente de frenada de emergencia automática en ciudad Front Assist y limitador de velocidad. En opción se podrá completar con un control de crucero activo -ACCque funciona hasta los 210 km/h; el control del ángulo muerto en los retrovisores con asistente
de salida de aparcamiento -avisa si vienen vehículos por la parte trasera-; y una función que frena automáticamente durante las maniobras a baja velocidad si detecta un posible golpe. Potencia moderada La oferta mecánica no guardará grandes sorpresas, salvo que la gama inicial para nuestro país no incluirá el motor de gasolina 1.5 TSI de 150 CV -sí se ofrece en el Seat Ibiza-... aunque, por suerte, habrá una versión GTI -ver despiece-. De esta forma, comenzará con el 1.0 MPI -tres cilindros atmosféricocon 60 y 75 CV, seguido por el 1.0 TSI -turboalimentado- con 95 y 115 CV; únicamente este último dispondrá de caja de cambios manual de seis velocidades -cinco en el resto-, mientras que la automática DSG de siete relaciones se podrá combinar con los motores de 95 CV en adelante. En diésel la oferta es más simple, con un único bloque 1.6 TDI y dos niveles de potencia, 80 y 95 CV, ambos con caja manual de cinco velocidades -DSG opcional para el más potente-. Por último, la tercera vía hace referencia al 1.0 TGI, un motor que puede funcionar con gasolina o gas natural; entrega 90 CV y está asociado a un cambio manual de cinco velocidades.
▲Lo bueno: La dotación tecnológica será muy superior a la de cualquier otro utilitario. ▼Lo malo: Aunque sea el mejor, sus actuales rivales también han evolucionado mucho.