Lo mejor: rápido y estable

El Kuga no experimenta cambios en chasis ni en el apartado mecánico, porque este motor 1.5 EcoBoost de 150 CV ya lo incorporó el anterior Kuga poco antes del restyling. La respuesta del 1.5 es muy buena, pues a sólo 1.600 rpm ya entrega un par de 240 Nm. Eso, unido a la pronta respuesta del turbo, hacen que este Kuga sea agradable y bastante rápido -tarda 9,7 segundos en pasar de 0 a 100 km/h-. También es poco ruidoso y apenas vibra. La parte negativa está en el consumo, pues lo normal es rondar cifras medias reales de unos 8,5 l/100 km. Por chasis, el Kuga destaca por sencillez de conducción y por transmitir mucha confianza en zonas de curvas. La suspensión es más bien firme, pero resulta cómodo. La dirección tiene un tacto y precisión adecuados y los frenos cumplen sin problema.