OPEL INSIGNIA GSI
¡Han vuelto!
Las siglas GSi se popularizaron a mediados de los años 80, como 'apellido' de la versión deportiva del Kadett, y alcanzaron su cénit en su sucesor, el Astra. Fueron empleadas por última vez en 2012, en el Corsa, y regresan casi cinco años después con el Insignia.
No es del todo nuevo...
El Insignia GSi equipa un motor 2.0 de gasolina con turbo, 260 CV, tracción a las cuatro ruedas y cambio automático de ocho velocidades; esta combinación mecánica ya se ofrece en la gama, junto el acabado más lujoso Excellence. El GSI se diferencia de este por contar con una altura al suelo rebajada en 10 mm, unos amortiguadores específicos y frenos Brembo con discos de 345 mm en el eje delantero. En el plano estético, incluye una estética exterior específica: paragolpes, llantas de 20", parrilla, alerón trasero...
Más rápido que el OPC
Opel asegura que el GSi será más rápido que el anterior Insignia OPC, dotado de un 2.8 V6 turbo con ¡325 CV! ¿Cómo es posible? En gran parte, por la notable reducción de peso, de nada menos que 160 kilos. Cabe destacar que, en 2018, llegará un GSi diésel.
▲LO BUENO: Será, con mucha probabilidad, una de las berlinas deportivas más asequibles. ▼LO MALO: Su consumo medio -8,6 l/100 kmserá más elevado que la media de sus rivales.