NEUMÁTICOS
●Hay que revisar las presiones, al menos, una vez al mes. Al mismo tiempo, se debe comprobar el estado general, es decir, el desgaste de la banda de rodadura y si existen daños en el flanco exterior -no está de más mirar también el lado interno-. ● Lo ideal es comprobar la presión
con nuestro propio manómetro -los hay de buena calidad desde unos 15€- y hacerlo con los neumáticos fríos -si no lo están, introducir 0,2 o 0,2 kilos más de presión-. Siempre es preferible llevar presión de más a que vayan por debajo de lo que indica el fabricante, algo muy perjudicial de cara al consumo.
● Conviene cambiarlos de eje antes de que rueden 20.000 km, debido a que el desgaste que sufren es diferente delante que detrás. De esta forma, logramos que se iguale lo máximo posible.
● La exposición al sol hace que la goma envejezca -aparecen grietas en los flancos- y se cristalice, de modo que quedan prácticamente inservibles. Las ITV están vigilando especialmente este aspecto. ● Hay que cambiar los cuatro neumáticos a la vez ya que es la única forma de que mantengan unas propiedades idénticas. No obstante, si sólo se reemplazan los de un único eje, mejor que los nuevos vayan al eje trasero.